Un día como hoy, pero de 1898, llegaba al mundo Golda Meir. Política, diplomática y estadista, fue la primera mujer en Israel y tercera en el mundo en asumir un cargo tan alto como la de jefe de Gobierno.
Gracias a su política intransigente y su capacidad de liderazgo, le quedó el mote de “Dama de Hierro”. Nacida como Golda Mabovitch, la ex Primer Ministro israelí falleció el 8 de diciembre de 1978.
Protagonista de documentales y series antiguas y actuales, a causa de su histórica figura pública con un evidente salto de calidad, trabajó toda su vida en defensa de su pueblo y la creación de un estado judío. Sus pasos y decisiones llevaron al nacimiento del Estado de Israel en 1948.
A pesar del bajo nivel socioeconómico durante su niñez y adolescencia, Golda pudo estudiar y dedicarse a su gran pasión, la docencia. Y años más tarde, sus experiencias en Europa por querer luchar por la causa sionista, derivaron en que se afilie al partido político socialista judío.
Casada con su prometido Meir Meyerson, con quien tuvieron a Menájem y Sara, se radicaron en Tel Aviv. Una de sus principales razones de vida fue viajar a Estados Unidos para recaudar fondos suficientes para la causa llamada judaísmo y su guerra contra los árabes, algo que le valió la candidatura y posterior elección a Primer Ministro en 1969, por cinco años.
Por último, y si algo ella confesó alguna vez que cometió errores, fueron en la Guerra de Yom Kipur ante la alianza de los países árabes en 1973, ya que no logró su cometido principal: obtener la paz con ellos.