Una reciente investigación publicada detalla que los clérigos extranjeros se habrían estado escondiendo de la justicia en una pequeña diócesis ecuatoriana.
Una pequeña diócesis ecuatoriana se habría convertido en un canal internacional de fugas para sacerdotes que se encontraban señalados por presuntos abusos a menores en diversos puntos, una inquietante investigación periodística recientemente publicada señala que al menos 23 sacerdotes extranjeros habrían estado refugiados en Santo Domingo de los Tsáchilas, a 152 kilómetros de Quito.
La publicación presentada por El País de España y Report München de Alemania detalla que los acusados escaparon de Europa antes de enfrentar cargos de pederastia. El clérigo Emilio Sthle, quien falleció en 2017, fue el encargado de mantenerlos escondidos en Ecuador.
En los últimos meses las acusaciones contra Stehle sacudieron Alemania, debido a que más de una decena de mujeres declararon contra el religioso. Mientras la jueza Antje Niewisch-Lennartz, también tiene bajo observación al clérigo por ayudar a encubrir los delitos.
“Stehle y sus cómplices no solo son culpables de evadir la justicia, también han expuesto a un gran peligro a los niños sudamericanos que rodean al pastor” dijo la jueza para El País.
La diócesis de Santo Domingo estuvo bajo el cargo de Stehle entre 1987 y 2022. Los curas habrían empezado a llegar en 1988. Algunos de los acusados salieron de sus iglesias afirmando que iban a misiones sin detallar sobre su paradero.
La investigación
Cuando la información salió a la luz en 2021 la diócesis ecuatoriana se mostró sorprendidos debido a que Stehle gozaba de gran admiración en la localidad, incluso tiene una estatua de seis metros en Santo Domingo, construida después de su muerte.
A través de las investigaciones las autoridades han detallado que los sacerdotes eran procedentes de Alemania, Polonia, Irlanda, Italia, Suiza, Colombia y Perú. Mientras tanto la diócesis ha evitado dar declaraciones al respecto.