El gobierno de Venezuela anunció el domingo un nuevo aumento del salario mínimo y las pensiones, en esta oportunidad equivalente a un 50%.
Se trata del quinto aumento en un año y cuando entre en vigencia, el próximo 15 de enero, elevará ambas erogaciones a 40.683 bolívares: aproximadamente US$60 a la más alta de las tasas de cambio oficiales o US$12 a precios del mercado negro.
«Más 63.720 bolívares del Cesta-Ticket [un complemento salarial de obligatorio pago a todos los trabajadores venezolanos], significa que el Ingreso Mínimo Integral pasa a 104.358 bolívares», explicó el presidente Nicolás Maduro, quien destacó que eso equivale a «un aumento integral de enero a enero de 536% anualizado».
Según el mandatario, quien hizo el anuncio en su tradicional programa de radio y televisión dominical «Contacto con Maduro», la medida ayudará a proteger trabajos e ingresos en «tiempo de guerra económica».
Pero sus críticos afirman que solamente empeorará la profunda crisis que afecta a Venezuela.
Según estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), este año la inflación en el país sudamericano será del 1.600%.
Y esta inflación, la más alta del mundo, le ha restado mucho de su valor a la moneda local, el bolívar.
El país se ha visto afectado por los bajos precios de su principal producto de exportación, el petróleo, y los venezolanos se han visto afectados por una severa escasez de alimentos, medicinas y otros productos básicos.
Según el gobierno esto es el resultado de una «guerra económica» librada por la oposición, pero esta acusa al gobierno de incompetencia y corrupción.
Y el anuncio del nuevo aumento del salario mínimo fue inmediatamente criticado por varios legisladores opositores, para quienes la medida tendrá claros efectos inflacionarios.
«Aumento salarial financiado con impresión de dinero en el (Banco Central de Venezuela) inevitablemente produce más inflación. Ya eso está estudiado», advirtió a través de su cuenta de Twitter el diputado de la Mesa de Unidad Nacional José Guerra.
«¿Merecen los trabajadores un aumento salarial? Sí. Pero un aumento del poder de compra pero no más billetes con los cuales se compra menos», agregó en otro mensaje.
Y el principal grupo empresarial de Venezuela dijo que el aumento salarial se había ordenado sin que mediaran consultas previas, lo que podría provocar despidos y obligar al cierre de pequeños negocios.
«Es justo y necesario», dijo sin embargo Maduro.
«Y seguiremos haciendo de tripas corazón para seguir protegiendo el empelo, la estabilidad, el derecho al trabajo y los ingresos (…) de nuestro pueblo. ¡Clase obrera de Venezuela, a la carga!», concluyó.
fuente:bbcmundo