La vicepresidenta Rosario Murillo afirmó que el primer lote llegó a Managua el martes por la noche, pero no brindó detalles de la cantidad de vacunas que fueron donadas.
MANAGUA, NICARAGUA – Nicaragua recibió en medio de críticas por el secretismo Estatal, un primer lote de vacunas Sputnik V, donadas por Rusia, según informó este miércoles la vocera y vicepresidente de Nicaragua, Rosario Murillo durante una alocución a medios oficiales.
De acuerdo a Murillo, el lote llegó a Managua el martes por la noche, pero no brindó detalles de la cantidad de vacunas que fueron donadas, ni tampoco dónde se encuentran almacenadas.
“Ayer por la tarde noche, recibimos una donación inicial de la Vacuna Sputnik V, como símbolo de la amistad y la cooperación solidaria entre la Federación de Rusia y Nicaragua. Está resguardada debidamente con todas las condiciones de frío que esas vacunas exigen”, dijo la vicepresidenta.
Además, informó que continúan esperando el resto de las dosis donadas a Nicaragua dentro de los programas y convenios suscritos con la Organización Mundial de la Salud (OMS), con las cuales se pretende inmunizar al 55% de la población.
Debe haber más información
De acuerdo con el doctor Carlos Hernández, integrante del independiente Comité Científico Multidisciplinario, la vacuna Sputnik, si bien es segura y efectiva, se requiere más información.
“No sabemos cuántas dosis llegaron y cuántas van a llegar después, y cuándo se iniciaría la aplicación de la vacuna”, señaló Hernández.
El galeno recalcó que antes de la aplicación de la Sputnik, deben hacerse públicos varios detalles “muy relevantes de la vacunación” como los protocolos de seguridad.
“Son protocolos de aplicación de cada una de las vacunas; tenemos varias particularidades por ejemplo que la primera dosis no es igual que una segunda, tiene que establecerse un orden bien claro para que la secuencia sea asegurada”
También, enfatizó que en todos los puestos de vacunación deben haber condiciones y personal calificado “para que las personas que se vacunen tengan total confianza”.
Por otro lado, señaló la importancia de que los puestos de vacunación sean ventilados y se apliquen las medidas de prevención tanto para las personas que llegan a vacunarse, como para quienes están vacunando.
Por su parte la doctora, Anely Pérez Molina, secretaria de la Unidad Médica Nicaragüense pidió que se priorice al personal médico del país dentro de la jornada de vacunación.
“Tiene que ser prioridad el sector de salud. Los médicos, enfermeros, auxiliares de enfermería, laboratoristas, tanto del sector privado, como público, eso dice la Organización Panamericana de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS). Piden que sea priorizado el personal de salud y después pacientes de riesgo como personas mayores de 60 años y personas menores, pero con enfermedades crónicas”, señaló Pérez a la VOA.
De acuerdo con un informe del no gubernamental Observatorio Ciudadano COVID-19, desde que se registró el primer caso del virus a la fecha, 869 trabajadores del gremio médico resultaron contagiados. De esa cantidad 115 no sobrevivieron a la enfermedad.
Cuando se reportó el primer contagio de coronavirus en marzo del año pasado, trabajadores de la salud denunciaron que el gobierno del presidente Daniel Ortega prohibía el uso de mascarillas, bajo el argumento que podrían causar zozobra en los centros hospitalarios. No obstante; embargo, el mandatario lo ha negado en sus discursos públicos.
Inmunidad
Según el Gobierno de Nicaragua, se accederá al menos a cuatro vacunas contra el COVID-19 de diferentes laboratorios, como parte del mecanismo COVAX de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Sputnik V, de origen ruso; Oxford AstraZeneca, de Reino Unido; Moderna, de Estados Unidos; y Covaxina, de la India.