WASHINGTON — Estados Unidos y la OTAN están prometiendo unidad para enfrentar desafíos, entre ellos la lucha contra el terrorismo, las amenazas cibernéticas y ampliar la seguridad en el sector de la energía, siete décadas después de establecer la sociedad transatlántica.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, partió el martes hacia Bruselas para asistir a la reunión de ministros de exteriores de la OTAN y reunirse con aliados clave de la alianza.
“Desafíos emergentes de seguridad y amenazas como el terrorismo y la seguridad energética” son los principales puntos de la agenda cuando Pompeo converse con los aliados antes de una cumbre de la OTAN en diciembre en Londres, informó el Departamento de Estado.
“Estamos viviendo en un tiempo totalmente nuevo donde tenemos terrorismo. También hay un cambiante balance de poderes globalmente y tenemos el ciberespacio y muchas otras cosas”, dijo el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, al servicio serbio de la Voz de América la semana pasada en una entrevista.
Todos los aliados de la OTAN integran la Coalición Global para Derrotar al EI, enfocada en el grupo terrorista Estado Islámico.
Las conversaciones tienen lugar días después de que Stoltenberg y más de 30 miembros de la coalición liderada por Estados Unidos se reunieron en Washington para reafirmar lo que los líderes dijeron que es un compromiso total para asegurar la derrota del EI.
La coalición repitió también una exhortación a todos los miembros para continuar una asistencia humanitaria en Siria.
Otro tema que se espera en la reunión es el de China y su tecnología 5G.
“¿Cómo la OTAN lidia con China?, preguntó Pompeo la semana pasada durante un discurso en el Instituto Baker en Houston. “La OTAN confronta los esfuerzos de China para socavar su seguridad, su seguridad en las comunicaciones. Y estamos conscientes de que la organización tiene que evolucionar”.
Estados Unidos ha estado presionando a sus aliados a tomar una posición más firme con Beijing y su tecnología 5G, impulsando una amplia campaña para boquear en los mercados mundiales a Huawei, uno de los principales vendedores de equipos de telecomunicaciones chinos y un participante clave en la red 5G.
A Washington le preocupa que Beijing pueda usar la red proporcionada por Huawei para espiar el tráfico de comunicaciones. Altos funcionarios estadounidenses amenazaron con reducir el intercambio de inteligencia con los aliados que usen equipos o tecnología de Huawei.
Aunque no específicamente en referencia a las advertencias de Estados Unidos sobre Huawei, Stoltenberg dijo que la OTAN exigirá a sus miembros proteger los sistemas civiles de telecomunicaciones, entre ellos los servicios 5G, y asegurar que tengan “servicios de telecomunicaciones confiables en tiempos de paz, crisis y conflictos”.
El director ejecutivo de Huawei, Ren Zhengfei, ha dicho que su compañía no comparte información confidencial de sus usuarios y niega que el gobierno chino controle la compañía.
El Servicio Serbio de la VOA contribuyó a este reporte.