México ya tiene casi todo listo para celebrar este domingo las elecciones más grandes de la historia del país.
No lo serán solo por el número de electores sino también por el de dirigentes que serán elegidos: los 500 miembros de la Cámara de Diputados, los gobernadores de 15 estados y unos 20.000 cargos locales.
El país llega a esta elección intermedia tras sufrir una de las campañas más violentas que se recuerden en la que al menos 35 candidatos fueron asesinados.
El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), sin embargo, llamó a la población a no dejarse intimidar y afirmó que la seguridad estará garantizada para que se pueda votar sin miedo. Incluso acusó a algunos medios de amarillismo y de magnificar lo ocurrido «con el afán de enrarecer el ambiente».
Sea como fuere, México tendrá en esta cita electoral una herramienta para revalidar o no el apoyo al partido de AMLO a mitad de su mandato al frente del gobierno.
Estas son tres de las claves para entender la importancia de estos comicios.
1. El futuro del gobierno de AMLO
La victoria de Morena, el partido de AMLO, está más que garantizada en la Cámara de Diputados según todas las encuestas hechas públicas antes de la veda electoral, pero la clave será ver si mantiene junto a sus aliados la mayoría calificada (más del 66% de los miembros) que tenía hasta ahora.
Pese a no contar con ella en el Senado (donde, sin embargo, también tiene mayoría al tener la mitad más uno de los votos) esta confortable mayoría en la Cámara le ha facilitado al oficialismo hasta ahora llevar a cabo -sin necesidad de negociar con la oposición- reformas constitucionales contempladas dentro del proyecto denominado por AMLO como Cuarta Transformación (4T).
De confirmarse este resultado, en lo que queda de mandato de AMLO podría incluso verse «la redacción de una nueva Constitución. Él ha puesto la 4T como un hito histórico y en cada una de las tres anteriores hubo un nuevo texto constitucional… así que en términos simbólicos, se ve posible», dice la analista política Palmira Tapia.
El resultado al que apuntaron la mayoría de sondeos, sin embargo, es el de Morena perder la mayoría calificada y en cambio quedar con «mayoría absoluta» (que México es la mitad más uno, es decir, la que tiene en el Senado) junto al resto de su coalición, formada esta vez por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y del Trabajo (PT).
Esta situación permitirá al grupo en el poder hacer cambios en leyes y aprobar presupuestos o iniciativas, pero no aquellas de rango constitucional que AMLO desea para consolidar sus cambios, por lo que deberá dialogar con la oposición.
«Ahí necesitará del apoyo de otros partidos pequeños, y veo al Movimiento Ciudadano (MC) como partido clave. Porque aún cuando Morena no alcance mayoría calificada, eso no implica que no pueda lograrlo con negociaciones posteriores», alerta Tapia.
Una opción que no recoge ninguna de las principales encuestas es que Morena y sus aliados no alcancen siquiera la mayoría absoluta o incluso pierdan frente a la coalición legislativa que formaron los partidos tradicionales del PRI, PAN y PRD.
Para Valeria Moy, directora del Instituto Mexicano para la Competitividad, «a México le conviene un Congreso sin mayoría calificada, sea de quien sea. Ninguna persona es poseedora de la verdad absoluta y debería tener contrapesos y que debatir para lograr una aprobación en el Congreso. Lo contrario no es beneficioso para ninguna democracia».
2. El impacto económico
En México aún resuena la polémica por la reciente portada de The Economist en la que tildaba a AMLO de «falso Mesías» y de «peligro para la democracia». En clave económica, el medio británico destacó la incertidumbre que vive el sector empresarial por las políticas del presidente mexicano, quien calificó de «majadera y muy grosera» la portada.
El Bank of America Merrill Lynch Global Research. uno de los tres mayores grupos financieros en EE.UU., señaló en un informe de mayo que la pérdida de la mayoría calificada para Morena sería positiva para la economía mexicana porque limitaría su capacidad de cambios constitucionales.
«La incertidumbre política, que tales cambios han generado, han impactado negativamente en la inversión y, muy probablemente, en el potencial de crecimiento de México», se lee en el análisis divulgado por Forbes y que sitúa sus previsiones de crecimiento del PIB al 5% para 2021 y 2,5% para 2022.
Valeria Moy subraya que vincular la recuperación económica del país al resultado de las elecciones del domingo sería un error ya que «México va a crecer, como todo el mundo; cuando una economía cae 8,5% en un año, lo normal es que rebote tras este tiempo (de pandemia) en que la economía estuvo prácticamente cerrada».
La economista y socia del Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales (Comexi) muestra su preocupación por la «oposición» de AMLO a la inversión privada, especialmente en el sector energético que defiende pertenezca al Estado.
«Ahí metió las reformas a la Ley de Hidrocarburos y a la Ley de la Industria Eléctrica, que son un golpe brutal para la competencia económica al privilegiar a las empresas estatales frente a otras nacionales y extranjeras (…). Estamos mandando señales terribles para la inversión», dice.
Ambas leyes, aprobadas por el Congreso y actualmente en suspenso por decisión de los jueces, podrían enfrentarse a nuevos frenos en caso de que el partido de AMLO perdiera la mayoría en la Cámara de Diputados.
De lograrla, Moy pronostica que el gobierno propondrá una reforma fiscal en lo que le queda de mandato. «Y es preocupante que tengan mayoría porque una reforma así se tiene que hacer bien, estudiar y discutirla con otros, y no sacarla como estas cosas que se están aprobando ahora ‘sin cambiar una coma’, como dice el presidente».
3. Récord de participación de mujeres
Las elecciones del domingo serán históricas también por el considerable crecimiento de mujeres que aspiran a ocupar un puesto en la Cámara de Diputados o estar al frente de alguno de los 15 estados que eligen gobernador.
De hecho, será la primera vez que los votantes verán una paridad de género entre los candidatos a las gubernaturas derivada de la reforma constitucional sobre paridad de 2019, lo que podría dar lugar a una foto inédita tras los comicios.
Según un análisis de Consulta Mitofsky, son ocho los estados donde existe mayor posibilidad de que una mujer sea su nueva gobernadora: Baja California Sur, Chihuahua, Colima, Campeche, Guerrero, Querétaro, Tlaxcala y Zacatecas. En las últimas cuatro décadas, tan solo siete mujeres consiguieron ser mandatarias estatales.
- 47,9%de candidaturas a gubernaturas son de mujeres (22% en 2018).
- 53,4%de fórmulas para la Cámara de Diputados son lideradas por mujeres (49,96% en 2018).
- 51,8%del electorado son mujeres.
- 66%de las mujeres votaron en 2018 (frente al 58% de hombres).
- 7mujeres lograron ser gobernadoras en México en los últimos 40 años.
Fuente: INE
Pese a que las cifras entre géneros se vayan equilibrando, el Instituto Nacional Electoral (INE) detectó que las mujeres siguen sin competir en condiciones de igualdad al recibir, por ejemplo, una cobertura de los medios muy inferior a la de los hombres, a veces estereotipada y con menos recursos.
«Claramente, si no tienen los mismos recursos para hacer campañas, no tienen las mismas posibilidades de ser electas», dice Dania Ravel, consejera electoral del INE.
Aunque el reto también continúa para ellas una vez electas en entornos tradicionalmente machistas. «Muchas veces no les permiten desarrollar su trabajo con normalidad porque sufren ataques por el simple hecho de ser mujeres, sobre todo a nivel municipal. El gran desafío para las mujeres en la política en México es la violencia por razón de género», agrega.
Más de la mitad del electorado en México son mujeres quienes, además, acuden a votar más que los hombres. Quizá por eso cabría pensar que, tras la gran fuerza tomada por el movimiento feminista en el país los últimos dos años, su voto podría ser determinante en estas elecciones.
Sin embargo, que haya más mujeres candidatas no se ha traducido necesariamente en más propuestas específicamente dirigidas a ellas durante la campaña.
«Yo no he advertido una gran diferencia en cuanto a más propuestas hechas con perspectiva de género. Sería deseable, pero no creo que pueda identificarse a un partido como genuinamente feminista», opina la politóloga Palmira Tapia.
«A lo mejor es aventurado decir que por el contexto de violencia contra las mujeres vivido desde hace mucho tiempo hará un reflejo en las urnas el 6 de junio. Pero, sin duda, las mujeres pueden determinar por sí solas el rumbo de una elección en México», concluye Ravel.
fuente:bbcmundo