Arantxa es española y hace apenas unas semanas viajó a Estados Unidos. Necesitaba pedir un visado ESTA por internet. El formulario cuesta US$14, pero acabó pagando unos US$84.
«Pensé que era la página oficial»
A Sara, que vive en Londres, le sucedió algo parecido cuando solicitó su tarjeta sanitaria europea por internet. Después de haber hecho la gestión y haber pagado unos US$25, se enteró de que era gratuita.
«La pagina web que usé (european-healthcard.org.uk) ya ni siquiera existe. Pero si buscas en internet verás muchos otros sitios web que piden dinero por ello, cuando en realidad es gratis», explica Sara.
Es el viejo truco del «copia y pega», que lleva años funcionando en internet y tendiendo trampas a miles de personas en el mundo con páginas fraudulentas.
Se trata de sitios web que parecen idénticos a ciertas páginas oficiales, pero no lo son.
Y confunden a los internautas para que paguen más por la gestión de un documento: desde la solicitud de un pasaporte o la gestión de un visado hasta transacciones bancarias o la declaración de la renta.
Una investigación que publicó la asociación de consumidores británica Which? en 2013 reveló que la mitad de quienes acceden a este tipo de páginas web «falsificadas» no son capaces de detectarlas.
Pueden parecer oficiales porque incluso cuentan con los mismos anuncios de Google. Y quienes las diseñan son expertos en no dejar escapar el más mínimo detalle.
¿Qué puedes hacer?
Desde el Centro de Seguridad en Internet para los menores en España, integrado en el programa Safer Internet («internet más seguro») de la Comisión Europea recomiendan en primer lugar, verificar siempre que la URL sea la correcta y que haya un pequeño símbolo de candado en la parte izquierda de la web.
También es importante revisar la gramática para no dejar pasar ningún error que pueda confundirnos, además de comprobar el registro del dominio.
Por último, verificar los comentarios de otros usuarios e, incluso, confiar en tu sentido común.
Pero si no tienes tiempo para seguir estos pasos, los especialistas recomiendan que visites la siguiente página web: Desenmascara.me
Para comprobar si estás o no ante una web falsa, tan solo debes copiar y pegar el enlace. Hasta ahora, la plataforma ya ha detectado más de 77.000 sitios falsos.
En Which? proponen seguir los siguientes pasos:
- Comprueba si es un anuncio: busca los resultados pagados del motor de búsqueda; los anuncios que aparecen en la parte superior de las páginas de resultados.
- Lee la página de inicio: tómate dos minutos para revisar la página web. No caigas en los trucos de los formularios de solicitud antes de leer el texto completo. A veces, incluso avisan de que el sitio no es el oficial.
- Comprueba la dirección web: que una web acabe en .org no garantiza que sea oficial. Por ejemplo, en el caso de Reino Unido debería ser gov.uk en lugar de org.uk.
- https vs http: aunque no siempre es una garantía, puedes comprobar el «http» que aparece al principio de la dirección del sitio web. Si estás introduciendo información personal, «https» sirve como forma de encriptación para proteger tus datos personales, a diferencia de «http».
Todavía son un problema
Mike Andrews, de National Trading Standards, una institución creada por el gobierno de Reino Unido en 2012 para proteger a los consumidores, dice que las páginas web falsas son «un asunto importante».
«En nuestra experiencia, todavía son un problema, sobre todo cuando la gente tiene prisa, busca algo en Google rápidamente y selecciona los primeros resultados»
Andrews señala que la situación era más grave «hace tres o cuatro años», aunque sigue ocurriendo. Según el experto, cada año hay entre 4.000 y 5.000 quejas al año, solamente en Reino Unido.
«Mucha gente se siente mal cuando les ocurre, pero es algo que sucede de forma muy habitual», asegura.
Es importante, señala Andrews, «revisar cuidadosamente» la página, «especialmente si te piden dinero».
Si ya es demasiado tarde
Pero si ya es demasiado tarde, hay algo que todavía puedes hacer: denunciar el sitio web y reclamar lo que pagaste de más.
Es recomendable emitir una queja a los organismos gubernamentales oficiales para que puedan llevar a cabo la correspondiente investigación.
También puedes denunciar el sitio web en Google, a través de un formulario que encontrarás en la siguiente dirección: safebrowsing.google.com (en la sección «Report Pishing», abajo a la derecha).
Y, por supuesto, reclamar el dinero estafado.
«El consumidor puede pedir una devolución si se lo comunica a la entidad bancaria de la tarjeta con la que efectuó el pago», explica Andrews.
«Y siempre aconsejamos que se pongan en contacto con el sitio web (a través del cual efectuaron la operación). Si al principio no lo consiguen, deben insistir. Ser persistente a menudo vale la pena«.
fuente.bbcmundo