La Policía israelí informó de que ha detenido a 30 personas sospechosas de incitar o causar algunos de los incendios que desde el pasado martes asuelan Israel y que se han extendido por Cisjordania (Judea y Samaria).
“Hasta ahora la Policía ha arrestado a sospechosos de causar 23 fuegos o por incitar al incendio”, dijo la portavoz policial Luba Samri, que actualizó a 30 el número de detenidos en los últimos días.
El también portavoz policial Micky Rosenfeld declaró que los detenidos “no son judíos”, sin dar más detalles.
El primer ministro, Biniamín Netanyahu, afirmó que “no hay ninguna duda” de que muchos de los fuegos son provocados y cree que Israel afronta una “ola de terrorismo incendiario”, mientras que algunas tesis imputan la autoría a personas árabes.
Netanyahu advirtió de que “cualquiera que intente prender fuego al Estado de Israel será duramente castigado”, mientras que su ministro de Interior, Aryeh Deri, avisó de duras consecuencias contra los posibles autores.
Jamal Zahalka, diputado árabe israelí y dirigente del partido nacionalista árabe Balad, lamentó que Netanyahu y varios ministros de la coalición hayan decidido “usar este desafortunado evento para lograr ganancias políticas, acusando a la minoría árabe de incendio premeditado antes de que se haga ninguna investigación policial formal”.
“Es desafortunado cuando personas elegidas optan por aumentar la división en la sociedad israelí y echan gasolina al fuego”, criticó en un comunicado, y señaló que son muchas las ciudades con un alto número de residentes árabes afectadas por los incendios.
La Policía anunció que sus patrullas siguen trabajando “para responder a los fuegos y encontrar sospechosos”.
Expuso que las labores de extinción, apoyadas por un avión cisterna llegado de EEUU, se centran en las colinas de Jerusalén, donde sigue activo el mayor fuego que provocó el cierre parcial de la principal carretera entre Jerusalén y Tel Aviv.
La cadena de incendios que comenzó el martes y que ha afectado especialmente la zona de Jerusalén y Haifa ha causado la evacuación de decenas de miles de personas, graves daños materiales y la quema de grandes extensiones de bosques. EFE y Aurora