Alrededor de 250 barcos se encuentran actualmente en aguas internacionales a las afueras de una zona económica exclusiva de 188 millas de ancho alrededor de la isla, pero su presencia ya ha planteado la posibilidad de daños graves al delicado ecosistema marino.
La exembajadora en El Salvador y actual Subjefa Civil del Comando de Sur de Estados Unidos, Jean Manes, denunció que una flota pesquera china depreda la zona de Galápagos, el archipiélago que inspiró la teoría de la evolución de Charles Darwin.
“La entrega de algunas máscaras por parte de China no oculta el saqueo continuo de peces y vida marina en una de las reservas más preciadas #Galapagos #Ecuador 225+ buques pesqueros y de procesamiento es inaceptable”, escribió en su cuenta de Twitter la diplomática.
“La comunidad internacional debe unirse” alrededor de este asunto, remarcó Manes.
El Comando Sur también alertó que “Ecuador ha dado la voz de alarma sobre una enorme flota pesquera de embarcaciones en su mayoría con bandera china cerca de la zona de protección de Islas Galápagos”.
“El tamaño y la agresividad de esta flota contra las especies marinas es una gran amenaza para el equilibrio de las especies en las Galápagos”, advirtió.
El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, declaró que la marina de su país está en alerta por la incursión de 260 barcos chinos en aguas internacionales entre Ecuador y las Galápagos desde el pasado abril.
Moreno agregó que el Ministerio de Relaciones Exteriores ecuatoriano informó “al Gobierno chino, de manera cordial pero firme, que Ecuador hará prevalecer sus derechos marítimos sobre su zona económica exclusiva, sin distinción de bandera”.
“Al mismo tiempo, he dispuesto que se realicen las consultas necesarias con los Estados ribereños del Pacífico, los hermanos países de Colombia, Panamá, Costa Rica, Perú y Chile, para tener una postura regional sobre este tipo de amenazas”, dijo el Presidente Moreno.
“Es una flota depredadora”, afirmaba el comandante de la Armada ecuatoriana, Darwin Jarrín Cisneros, tras comprobar en 2019 que los pesqueros chinos regresaban a arrasar con los recursos marinos de las Galápagos. La incursión ha sido recurrente en los últimos años, al punto que en 2017 fue capturado un buque chino por autoridades ecuatorianas, que les confiscaron seis toneladas de pesca de especies protegidas, informaron medios del país sudamericano.
Alrededor de 250 barcos se encuentran actualmente en aguas internacionales a las afueras de una zona económica exclusiva de 188 millas de ancho alrededor de la isla, pero su presencia ya ha planteado la posibilidad de daños graves al delicado ecosistema marino, dijo una ex ministra de medio ambiente, Yolanda Kakabadse, a The Guardian.
“El tamaño y la agresividad de esta flota contra las especies marinas es una gran amenaza para el equilibrio de las especies en las Galápagos”, agregó.
El medio elmundo.cr informó que China consume el 30% de la captura mundial, mientras que los chinos son el 18% de los habitantes del planeta. “El desmesurado apetito de los chinos ha despoblado los mares cercanos y, por lo tanto, los barcos de pesca con bandera roja se han ido cada vez más lejos, en aguas internacionales o en otros países”.