El que es considerado el mayor escándalo de fraude educativo en la historia de Estados Unidos vivió este lunes un nuevo capítulo.
Una de las principales inculpadas, la actriz estadounidense Felicity Huffman, se presentó visiblemente afectada ante un tribunal de Boston, Massachussets, donde se declaró culpable de conspiración fraudulenta para conseguir una plaza en una universidad de élite para su hija.
La estrella de películas como «Transamérica» o la serie de televisión Desperate Housewives («Esposas desesperadas») admitió haber pagado US$15.000 para que se alteraran las respuestas de su hija en el examen de ingreso a la universidad en 2017.
La actriz se enfrentaba a una posible pena de 20 años de cárcel, pero tras haber alcanzado un acuerdo, la fiscalía pidió cuatro meses de cárcel y una multa de US$20.000 para Huffman.
La estrella de Hollywood no habló con la prensa al llegar a la audiencia de este lunes de la mano de su hermano, Moore Huffman.
Según periodistas presentes en la sala del tribunal, la actriz ganadora de un premio Emmy lloró al declarar ante el juez,
Ya el mes pasado, Huffman dijo en un comunicado que acepta totalmente su culpabilidad.
«Esta transgresión hacia ella [su hija] y el público la llevaré conmigo el resto de mi vida. Mi deseo de ayudar a mi hija no es excusa para violar la ley o ser deshonesta», declaró en aquel momento.
Operación Varsity Blues
La actriz, de 56 años, está entre las 50 personas imputadas en la operación «Varsity Blues» que destapó un gran esquema de fraude y sobornos para las admisiones universitarias de hijos de ricos y famosos.
Los padres implicados en la investigación están acusados de haber pagado sobornos, alterar los exámenes e incluso editar fotografías para que sus hijos aparecieran como estrellas del deporte en distintas disciplinas.
De esta manera aseguraron de forma fraudulenta plazas para sus hijos adolescentes en universidades de élite de EE.UU. como Yale, Georgetown y Stanford, entre otras.
Cuál fue el papel de Huffman
Según los documentos del tribunal, Huffman fue grabada de forma secreta por el cerebro confeso del fraude, William Singer, cuando empezó a colaborar con los investigadores.
Singer gestionó los fraudes a través de su empresa Edge College & Career Network, un negocio de preparación para la universidad.
La acusación alega que Singer ayudó a Huffman a falsificar el examen SAT (la prueba de ingreso a la universidad en EE.UU.) de su hija mayor, Sophia Macy.
Cuando la escuela de Sophia quiso supervisar a la joven mientras hacía el examen, Huffman le escribió un correo a Singer en el que decía: «¡Ruh Ro!», el latiguillo que utilizaba el perro del cómic Scooby-Doo cuando se metía en un lío.
Singer hizo las gestiones para que Sophia pudiera completar el examen en otro sitio.
La joven obtuvo una calificación de 1420 de los 1600 puntos posibles en el examen manipulado, unos 400 puntos más que un SAT preliminar que hizo un año antes.
La actriz adelantó las gestiones para hacer trampa una segunda vez con su hija más pequeña, pero al final decidió no hacerlo, según los fiscales.
Huffman declaró que su hija no estaba al tanto del engaño y dijo que siente «arrepentimiento y vergüenza» por haberla «traicionado».
La actriz recibirá sentencia el 13 de septiembre.
El mes pasado, la plataforma de contenidos Netflix pospuso el estreno de la película Otherhood, protagonizada por Huffman, previsto para el 26 de abril. No se especificó una nueva fecha de estreno.
Pese a que Huffman es una de las figuras de más alto perfil en el escándalo, los US$15.000 que pagó suponen una de las cantidades más pequeñas supuestamente pagadas por cualquiera de los otros padres imputados en el escándalo, según documentos legales.
Lori Loughlin, otra actriz de Hollywood implicada en el escándalo junto a su esposo, el diseñador Mossimo Giannulli, se declaró no culpable de pagar US$500.000 en sobornos para que sus hijas fueran aceptadas en la Universidad del Sur de California como parte del equipo de remo.
Las autoridades estadounidenses declararon que esta es la mayor investigación en temas de educación en la historia del Departamento de Justicia: involucró a más de 200 agentes y llevó al arresto de 50 personas en seis estados.
fuente:bbcmundo