El presidente francés, François Hollande, defendió la conveniencia de la conferencia sobre Oriente Medio que se celebra en París y subrayó que “buscar la paz no es un sueño del pasado”, en alusión a los comentarios críticos que ha vertido el primer ministro, Biniamín Netanyahu.
Netanyahu consideró la conferencia -a la que no asisten ni israelíes ni palestinos- “una reliquia del pasado, el último impulso del pasado antes de que llegue el futuro”.
En respuesta a esas palabras, Hollande, que se dirigió a los representantes ministeriales de 70 países presentes en la capital francesa, afirmó que la búsqueda de la paz a través de un acuerdo que permita la coexistencia de dos Estados, uno israelí y el otro palestino, “no es un sueño del pasado”.
“Es el objetivo de la comunidad internacional en toda su diversidad”, afirmó Hollande.
El presidente francés precisó, sin embargo, que “no se trata de dictar a las partes los parámetros de la solución”, pero sí de incitarles a que regresen a la mesa de negociación, donde no se sientan desde abril de 2014.
Hollande alertó de que la solución de los dos Estados “está en peligro” tanto por el avance de los asentamientos israelíes como por el incremento de la violencia.
En este sentido, Hollande se refirió al que calificó de “abyecto” atentado del pasado día 8 en Jerusalén, donde un terrorista palestino al volante de un camión arremetió contra un grupo de jóvenes soldados israelíes y asesinó a cuatro de ellos.
Frente a ese panorama, el presidente francés destacó la importancia de “inscribir el proceso de paz de Oriente Medio en la agenda internacional”, porque la región no puede encontrar la estabilidad “sin resolver su conflicto más antiguo”.
Hollande también envió un mensaje al presidente electo de Estados Unidos, quien toma posesión del cargo el próximo día 20, y le dijo que “no se pueden improvisar soluciones, hay que aprender las lecciones de la historia”.
Durante la campaña electoral para los comicios presidenciales estadounidenses, así como en alguna otra ocasión Trump insinuó que podría decidir el cambio de la sede de la embajada de Estados Unidos en Israel, trasladándola de Tel Aviv a Jerusalén. EFE y Aurora