El presidente de Bolivia, Evo Morales, aseguró este miércoles que en su país «está en proceso un golpe de Estado» y llamó a sus seguidores a «defender la democracia».
El mandatario boliviano realizó estas declaraciones en medio de las denuncias de fraude realizadas por la oposición tras las elecciones del domingo, que han hecho que en los últimos días miles de ciudadanos salieran a las calles a protestar.
En conferencia de prensa en La Paz, Morales dijo: «(Quiero) denunciar ante el pueblo boliviano y ante el mundo entero: está en proceso un golpe de Estado, aunque quiero decirles que ya lo sabíamos con anterioridad. Se ha preparado la derecha con apoyo internacional para un golpe de Estado».
«Hasta ahora humildemente aguantamos, soportamos con paciencia para evitar violencia, y no hemos entrado en la confrontación», agregó. «Pero quiero decirle al pueblo boliviano: estado de emergencia y movilización pacífica constitucional para defender la democracia!».
Seguro de su victoria
Morales, quien gobierna desde 2006, también dijo estar «casi segurísimo» de que ganará su cuarto mandato consecutivo, periodo que se extiende de 2020 a 2025, gracias al voto rural.
Según los resultados divulgados este miércoles de mañana por el Tribunal Supremo Electoral (TSE), actualizados al 96,78%, Morales alcanzó el 46,49% de los votos y que Carlos Mesa, su principal rival electoral, tuvo 37,01%.
De confirmarse esta diferencia, menor a los 10 puntos porcentuales, habría una segunda vuelta entre ambos candidatos.
Morales, sin embargo, dijo: «Aunque el conteo del TREP (Transmisión de Resultados Electorales Preliminares) dijo que ganamos, somos respetuosos al informe oficial que brindará el Tribunal Supremo Electoral».
Además, auguró que contará con mayoría parlamentaria.
Manto de dudas
Una parte de la comunidad internacional y varios organismos han puesto un manto de dudas sobre el proceso electoral boliviano.
De hecho, este martes el vicepresidente del TSE, Antonio Costas, presentó su renuncia al cargo cuestionando la «desatinada» decisión del resto de miembros de ese panel de seis miembros de suspender la difusión de las cifras preliminares.
En su carta de renuncia, Costas afirmó que esa medida había «desacreditado todo el proceso electoral, causando una convulsión social innecesaria».
La desconfianza en el conteo de votos despertó una ola de masivas manifestaciones de grupos oficialistas y opositores a lo largo de Bolivia.
fuente.bbcmundo