Un estudio realizado por la Universidad de Tel Aviv explica que al dedicarle tanto tiempo al uso de los celulares inteligentes, la relación entre niños y padres puede afectar al desarrollo de los pequeños.
El uso excesivo de smartphones por parte de los adultos puede traer graves consecuencias en el desarrollo de sus hijos, según un estudio realizado por la prestigiosa Universidad de Tel Aviv.
Para llegar a esta fuerte conclusión, se experimentó con una gran cantidad de madres, sus teléfonos celulares, y sus hijos. Cabe destacar que el estudio se realizó únicamente con mujeres, pero que según los investigadores, puede aplicarse a los padres también.
«Nuestro objetivo era simular situaciones de la vida real en las que la madre tiene que cuidar de su hijo
y al mismo tiempo dedicar parte de su atención a su smartphone», explicó la doctora Katy Borodkin, quién encabezó el estudio.
Al enfocarse los padres demasiado en su celular, la conexión con los niños pierde fuerza. De esa manera el desarrollo de los pequeños puede demorarse más de lo considerado «normal». Se cree que puede significar esto un problema a futuro porque las personas adultas le dedican cada vez más tiempo a las tecnologías.