La rutina matutina de Grace Lee suele consistir en dedicar dos horas a pensar en ideas para su canal de YouTube, What´s So Great About That? (¿Qué tiene de genial eso?), una serie que discute películas y programas de TV populares.
El proceso de Lee, una joven de 24 años de Peterborough, Inglaterra, incluye investigar ideas y escribir guiones en los que ayuda a explicar ciertos conceptos a sus 29,000 espectadores.
Posteriormente le dedica tiempo a otro canal, The Financial Diet (La Dieta Financiera), una organización de asesoramiento financiero con 630,000 suscriptores para la que investiga y edita videos explicativos animados o de trucos para resolver problemas de la vida diaria.
«Estoy en Youtube desde el año en el que empezó, pero no sabía nada de ayuda profesional para youtubers hasta que estaba en mi segundo año en la universidad», explicó Lee. «Todavía se me olvida, al ver a alguien (en video) que tienen un equipo, a pesar de que yo soy parte de un equipo».
Esos arreglos son bastante comunes. Tomemos, por ejemplo, a Patrick Starr, un vlogger (video bloguer) filipino-americano con 4,3 millones de suscriptores. El tiene a todo un equipo de apoyo que incluye a su agente, encargado de publicidad, encargado de negocios, director de operaciones y editor de video.
Starr los invitó al escenario en VidCon Londres, una conferencia de YouTube que se realizó el mes pasado, para mostrar cuántas personas se necesitan para producir su programa.
«¿Alguna vez se imaginaron que tendría a tanta gente?», le preguntó a la audiencia. «Vaya, esto sí que es costoso».
De «transmisión propia« a transmisión de TV
La realidad de muchos canales dista mucho del ideal de YouTube de «Broadcast Yourself» (transmisión propia), lema que promovió el sitio de 2005 a 2012.
Actualmente es cada vez más difícil asumir el desafío de ser un YouTuber moderno sin una red de apoyo. Y esto tiene que ver con cómo las celebridades del sitio ganan dinero.
«Se trata de alimentar el algoritmo y tener suficiente contenido«, explicó Sophie Bishop, profesora de humanidades digitales en King’s College, en Londres. «Ser bueno para crear contenido divertido y entretenido no es lo mismo que ser bueno con la administración del tiempo, contactar a marcas y asegurarte de que tienes suficientes colaboraciones de marcas para sustentarte durante el mes».
Como resultado, personas como Grace Lee y el londinense Konstantin Ermakov, de 26 años, se han convertido en miembros invaluables de grandes equipos de apoyo de YouTube.
Ermakov es un videógrafo y editor de video profesional que trabaja para youtubers como The Sidemen, el colectivo de creadores originado por Olajide «KSI» Olatunji, quien sube videos musicales y sobre estilo de vida, y Brian «True Geordie» Davies, quien presenta videos de futbol y un programa de radio con el mismo nombre.
Ermakov empezó grabando videos musicales para artistas en Londres, después mantuvo empleos en empresas hasta que consiguió trabajos filmando y editando para YouTube. En poco tiempo este último oficio se convirtió en su vida profesional.
«YouTube en este momento es mi enfoque principal. Trabajo con creadores casi a diario», dijo.
Ermakov considera que tanto él, como otros que trabajan como personal de apoyo independiente, son los beneficiarios de una «carrera armamentista»de YouTube.
Cada minuto se suben más de 400 horas de video a YouTube, lo que hace que cada vez sea más difícil sobresalir y crear una reputación en el sitio.
Los youtubers también intentan ganarle al algoritmo, la «caja negra» que mueve a YouTube y recomienda videos a sus 1,9 millones de usuarios registrados.
Aunque pocos conocen los secretos del algoritmo, el consenso general es que promueve videos de alta calidad, que se suben con regularidad, con una duración decente y que alientan a los usuarios a permanecer en el sitio más tiempo. YouTube no respondió a nuestra solicitud para comentar.
Prácticamente, a los youtubers exitosos se les pide que produzcan mini episodios de TV casi todos los días, con una calidad lo suficientemente buena como para ser transmitidos por cable, entretenidos y emocionantes. Todo esto sumado a las presiones de dirigir un nuevo negocio.
Como resultado, los creadores que pueden pagarlo, necesitan toda la ayuda que puedan conseguir para sobresalir.
«El objetivo es crecer hasta un punto en el que estás generando tanto contenido de alta producción que la competencia no puede seguirte el paso», dijo Ermakov. «Lo más fácil sería colocar una cámara sobre un trípode y filmarse así mismos, pero lo que buscan es ofrecer algo mejor».
Existe una fina línea entre la profesionalización y mantener la estética propia de YouTube.
«La participación de la audiencia se apaga y (los usuarios) sentirán que están viendo un programa de televisión» si no eres lo suficientemente hábil, comentó Ermakov.
Esparciendo la fama
La mayoría de los youtubers no niegan que han recibido ayuda. De hecho, el personal de apoyo puede ser a veces celebridades en su propio ámbito. Los seguidores del músico y youtuber británico Dodie siguen con igual interés la carrera de su agente Josh Edwards.
Edwards aparece en el video en parte porque es un personaje atractivo, pero también por razones prácticas, él sigue a Dodie a muchos de sus eventos aconsejándola sobre su carrera musical.
La asistente personal de la youtuber de moda y maquillaje Tanya Burr, sale con frecuencia en sus videos, mientras que Zoe «Zoella» Sugg, una de las youtubers más populares de Reino Unido, llama con frecuencia al personal de su oficina para obtener ideas de videos.
El incluir al personal tras las cámaras es una decisión consciente por parte de los creadores de contenido, quienes saben que son responsables ante su audiencia. La autenticidad —o la ilusión de esta— es un elemento importante de la identidad digital de los youtubers.
«Deciden hacerlo porque ya no hay la ilusión de que están haciendo este contenido ellos solos», dijo Bishop. «Nadie piensa que Zoella está produciendo su propio contenido de manera independiente».
Sin embargo ya no son los grandes youtubers los que están delegando tareas. Aunque los mejores editores para los youtubers más grandes pueden obteneringresos de seis cifras al año, la economía de proyectos ofrece una solución más asequible para los posibles youtubers.
Un nuevo trabajo extra
La estudiante de maestría Navena Deljanin, de 27 años, estudia en Belgrado pero gana entre US$800 y US$1.000 al mes editando videos para otras personas. Aproximadamente el doble del salario mensual en Serbia.
Ella es una de las más de 6.000 personas que anuncia sus habilidades en Fiverr, un sitio web de contrataciones. Ella empezó editando sus propios videos, luego se dio cuenta de que podía hacer lo mismo para otras personas. Actualmente ha realizado 150 ediciones para diversos clientes en Fiverr durante el año pasado.
«Este es prácticamente mi trabajo de tiempo completo«, explicó ella. «Normalmente trabajo de 9am a 5pm. Es genial que trabajo desde casa y puedo organizar mi horario como me convenga y tengo tiempo para dedicarle mis otros deberes».
Es poco probable que Deljanin se quede sin trabajo. Entre el estrés de subir contenido de alta calidad con frecuencia para el algoritmo de YouTube, cada vez más y más creadores están contratando edición de video de terceros. Es la nueva norma.
«Para hacer esto como trabajo, tienes que estar al tanto de todo», dijo Bishop: «Acuerdos con marcas, mercancía y más. Hay muchos más aspectos en torno a este trabajo que crear contenido».
Aunque YouTube se presentó en un inicio como el opuesto del sistema de producción de Hollywood, cada vez se parece más a los viejos medios que está tratando de reemplazar.
fuente:bbcmundo