Su llegada al atolón requirió una operación logística completamente fuera de lo normal.
El presidente Barack Obama realizó una solitaria visita al atolón de Midway en las islas hawaianas, un lugar en el que viven menos de 50 personas, por lo que es claro que ya no está interesado en votos si no en impulsar su agenda ecológica.
“Espero saber que dentro de 20 o 40 o 100 años, éste siga siendo un lugar al que la gente pueda venir y ver cómo luce cuando no hay gente y cuando no se le destruye”, dijo Obama, con su camisa desabotonada y bañado por el sol.
Su llegada al atolón requirió una operación logística completamente fuera de lo normal, considerando que el atolón no tiene servicio de teléfonos celulares ni las ventajas de la vida moderna.
Obama tuvo que volar en una versión mucho más pequeña del Air Force One desde Honolulu, aterrizando en una pista que consiguió fama luego de la Batalla de Midway, un evento decisivo en la II Guerra Mundial.
En un preludio a su visita, Obama cuadruplicó el área protegida del Monumento Nacional Marino Papahanaumokuakea que rodea a Midway, y lo convirtió en el área marina protegida más grande del mundo.
Obama describió el atolón como “tierra sagrada”, un ecosistema delicado que muy pocos estadounidenses han visitado, pero que es hogar para cientos de especies únicas, arrecifes de coral y aguas color turquesa, que ocupa un lugar especial en las tradiciones de los nativos hawaianos.
Su visita tiene lugar cuando solo le quedan meses en la presidencia y busca amarrar un agesivo legado sobre el cambio climático y la protección ambiental.
Después de Midway, Obama planea hacer su viaje final a Asia el sábado, con una visita a China
fuente.voanoticias