«Esto es lo peor que hemos vivido».
Así describió Noelvis Pérez el paso del huracán Matthew por Baracoa, la ciudad más antigua de Cuba.
Matthew no dejó ningún muerto en esa localidad de la provincia de Guantánamo, en el sureste de la isla, pero las imágenes muestran como quedó hecha pedazos.
«Fueron 10 horas de mucho ruido, de mucho viento. Las olas del mar llegaron hasta nuestras casas», contó Pérez a BBC Mundo en una comunicación telefónica con su celular, ya que las líneas fijas están caídas en toda la ciudad.
Baracoa es también conocida como la Ciudad Primada porque es el asentamiento más antiguo de la isla tras la llegada de los exploradores españoles hace 505 años.
El martes, Baracoa fue golpeada por el huracán Matthew de categoría 4 causandovoladura de techos, derrumbe de casas e inundación.
El ojo de la tormenta entró por Punta Caleta, también en la provincia de Guantánamo, el martes a las 6 de la tarde y se mantuvo estacionario durante varias horas hasta que salió de la isla esta madrugada.
Y eso probablemente lo hizo incluso más devastador, la tormenta parecía no irse nunca.
Las imágenes de la zona afectada de la isla muestran la devastación que el huracán causó en Baracoa.
Allí, 35.000 residentes, de un total de 83.000, fueron evacuados de las casas que estaban más próximas a la costa antes de que llegara la fuerte tormenta, según confirmaron autoridades cubanas.
«Una hora y media de silencio total»
Novelis Pérez vive a cuatro cuadras del mar. La crecida del mar terminó mojando todas sus pertenencias, hasta la comida.
«Las ráfagas eran de 250 km y traían el agua del mar y todo lo que encontraba en su camino», dijo esta mujer de 50 años que es la directora de la Biblioteca de Baracoa.
Relató que ella, junto a su hijo de 23, se refugiaron en uno de los cuartos de la casa. «Amarramos las puertas con clavos y detrás pusimos una cama para que aguantara y ahí estuvimos 10 horas», describió.
«Hubo un momento que paró, a eso de las 11 de noche, cuando pasó el ojo del huracán. Fueron una hora y media de un silencio total, mucho calor, todo tranquilo y luego el huracán volvió más fuerte y fue el desastre total«, dijo Novelis Pérez.
«Sentí mucho dolor, mucha tristeza. Fue horrible, pensé que no íbamos a aguantar. Me abracé a mi hijo. Esto es lo peor que hemos vivido»
El huracán Matthew pasó a principios de semana por Haití y República Dominicana, donde dejó al menos 9 muertos, decenas de miles de desplazados y grandes daños materiales.
Después de pasar por Cuba, la tormenta, de categoría 3 y con vientos sostenidos de 195 km/h, puso rumbo a Bahamas.
Según los pronósticos, la tormenta tocará Florida (EE.UU.) en la tarde del jueves y permanecerá hasta el viernes.
fuente:bbcmundo