Reportes no confirmados que circulan en los sitios web de la oposición siria indican que una delegación rusa abandonó el territorio sirio con un féretro, y dentro del mismo, los restos mortales del espía israelí Eli Cohen. Los informes se basan en rumores que comenzaron a propagarse en las redes sociales, e Israel se niega a comentar.
Ministros del Gabinete le dijeron al Canal 12 que desconocen hasta el momento estos desarrollos. El canal sugiere que esos informes no son confiables.
Durante su reciente visita a Moscú, el primer ministro, Benjamín Netanyahu, le dijo a los periodistas que la repatriación desde Siria del cuerpo del soldado Zachary Baumel, no indica un nuevo desarrollo con respecto a los otros dos soldados israelíes desaparecidos en la batalla de Sultán Yacoub, en el Líbano, en 1982. No obstante, Netanyahu puntualizó que los esfuerzos continúan y que el presidente ruso, Vladimir Putin, expresó su disposición a ayudar a Israel en esta cuestión humanitaria.
El cuerpo del legendario espía israelí no ha sido regresado de Siria, a pesar de los numerosos pedidos de su familia.
Cohen penetró en los más altos niveles de la dirigencia política siria años antes de la Guerra de los Seis Días, en 1967, y la información que suministró jugó un papel importante en el espectacular éxito israelí durante esa conflagración militar.
Cohen fue juzgado y ejecutado por espionaje por el régimen sirio el 18 de mayo de 1965, tras haberse infiltrado durante cuatro años en el gobierno de Damasco bajo el alias de Kamel Amin Thaabet.
El año pasado, el servicio secreto Mossad recuperó el reloj de Eli Cohen en una operación especial y se lo entregó a su familia en una ceremonia que contó con la presencia del primer ministro y el director de la agencia de espionaje, Yossi Cohen.
Aurora