57, 812 personas han muerto en EE.UU., más del doble de los fallecidos en Italia (27.359), uno de los países más duramente afectados por el nuevo coronavirus.
Expertos han desaconsejado volver a la normalidad muy temprano ya que podría resultar contraproducente; sin embargo, a pesar de no cumplir con los criterios del plan federal para reabrir el país, los líderes estatales en EE.UU. se apresuran por restablecer la economía.
El número real de casos de coronavirus en el país podría estar muy por encima del reportado y es todavía desconocido debido a la falta de pruebas de COVID-19 en gran escala.
El presidente Donald Trump dijo en su rueda de prensa diaria que «pronto» EE.UU. podrá realizar cinco millones de pruebas de coronavirus a diario.
Según datos de la Universidad John Hopkins, desde que se detectaron los primeros casos de coronavirus —a finales de enero según el Centro para el Control de Enfermedades (CDC) — se han realizado 5,6 millones de pruebas en todo el país.
Nueva York ha sido el estado más afectado por la pandemia del coronavirus, con casi 300,000 casos y alrededor 22,000 muertes. Sin embargo, el número de contagios se ha estabilizado en el región y, de mantenerse la tendencia por las próximas dos semanas, el gobernador anunció que comenzará a relajar las restricciones en la zona norte.