Una nueva investigación de la Universidad de Tel Aviv, Israel, los calificó como uno de los comunicadores más sofisticados del reino animal.
Son considerados uno de los animales más repulsivos. Tanto en edificios como en casas, durante las noches, suelen colarse e irrumpir en la tranquilidad del hogar. Su presencia en la oscuridad intimida, asusta. De hecho, un estudio reciente sobre la belleza animal los clasificó en la categoría “feos”. Aunque dentro de sus cualidades positivas, está la de la comunicación.
Una nueva investigación de la Universidad de Tel Aviv, Israel, los calificó como uno de los comunicadores más sofisticados del reino animal. Con el afán de analizar su lenguaje, registraron todos los sonidos emitidos por 22 murciélagos egipcios reunidos en una cueva durante 75 días. Cumplido el plazo, lograron recopilar alrededor de 15,000 vocalizaciones; una muestra representativa del lenguaje completo de la especie.
Los resultados, publicados en Scientific Reports y luego reproducidos por la prestigiosa revista Nature, mostraron que, pese a que todas las vocalizaciones de los murciélados suenan igual al oído humano, hay palabras específicas que se distinguen.
“Hemos demostrado que un gran volumen de vocalizaciones de murciélagos -que antes se pensaba que todas significaban lo mismo- por ejemplo frases como “¡Fuera de aquí! Su lenguaje contiene mucha información”, explicó a The Guardian Yossi Yovel, zoólogo y coautor del estudio.
Los investigadores, además de grabar todos los sonidos reproducidos por los mamíferos, filmaron en video las situaciones en las que se producían. Luego de eso, procesaron las 15.000 vocalizaciones a través de un algoritmo de reconocimiento de voz.
El sistema les permitió agrupar los sonidos en 4 grupos y situaciones determinadas: desacuerdos sobre comida, intentos de apareamiento, espacio para dormir y espacio para posarse mientras estaban despiertos. Cerca del 60% fueron clasificados con éxito en una de las cuatro categorías identificadas.
Aunque uno de los elementos más sorprendentes que arrojó el análisis fue la capacidad del animal de identificar al receptor y comprender el contexto que lo rodea.
“Encontramos que las llamadas de murciélago contienen información sobre las identidades de la persona que llama, lo que implica que hay un factor de reconocimiento -remarcó Yovel-. Además, pudimos discernir el propósito y el contexto de la conversación, así como el posible resultado de la discusión”.
Los investigadores, a su vez, lograron captar distintos tipos de entonaciones que indicarían que el destinatario del mensaje se trata de un “amigo” o un “enemigo”.
El científico enfatizó en un comunicado: “Para nuestra sorpresa, fuimos capaces de diferenciar entre todos estos contextos en completa oscuridad y estamos seguros de que los murciélagos son capaces de identificar aún más información y con mayor precisión. Después de todo, son una especie extremadamente social que convive con los mismos vecinos durante decenas de años”.
Fuente:radiohrn.hn