El número de muertos por coronavirus en EE.UU., el más alto del mundo, aumentó en más de 30,000 el miércoles después de duplicarse en una semana, mientras que Nueva York, el estado más afectado, ordenó a los residentes usar máscaras en ciertos entornos para combatir la pandemia.
El hito se alcanzó cuando los estados salvados de lo peor de la pandemia consideran un levantamiento parcial de las restricciones a la vida empresarial y social para el 1 de mayo, una fecha promovida por el presidente Donald Trump.
El objetivo de hacer que el país vuelva a trabajar adquirió mayor urgencia con la publicación de dos informes gubernamentales que muestran la caída de las ventas minoristas y la producción en fábrica el mes pasado.
Las muertes en Estados Unidos el miércoles llegaron a 30,400, según un recuento de Reuters, con 630,000 casos confirmados de coronavirus. Después de la primera muerte en EE.UU., informada el 29 de febrero, el país tardó 38 días en alcanzar las 10,000 muertes y nueve días en saltar de 10,000 muertes a 30,000.
Un modelo de la Universidad de Washington, citado a menudo por la Casa Blanca, predijo esta semana que el total de muertes de la pandemia en EE.UU. podría llegar a unos 68.800 a principios de agosto. Eso sugiere que Estados Unidos ni siquiera ha alcanzado el punto medio en posibles muertes.
Italia, con más de 21,000, tiene la segunda mayor cantidad de muertes reportadas causadas por el patógeno que surgió por primera vez el año pasado en China, seguida de España con más de 18,500. A nivel mundial, el patógeno ha matado al menos a 133,000 personas.
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Después de decir a principios de esta semana que Nueva York había pasado lo peor de la crisis, el gobernador Andrew Cuomo ordenó el miércoles a los 19 millones de residentes de su estado que usen máscaras o sustitutos cuando se encuentren en una situación pública que no les permita estar al menos a seis pies de distancia de otros. Los neoyorquinos tendrán tres días para cumplir con la orden, con el objetivo de garantizar que el usuario de la máscara no infecte a otros.
Cuomo dijo este miércoles que 752 personas murieron en su estado en el último día, un poco menos que el día anterior pero aún altas, aunque las hospitalizaciones disminuyeron en una señal de que la crisis se estaba aliviando.
«Si va a estar en público y no puede mantener el distanciamiento social, tenga una máscara y póngase esa máscara», dijo Cuomo en una rueda de prensa.
Nueva York está siguiendo el ejemplo de algunos lugares que ya tienen políticas con respecto a los revestimientos faciales en ciertas circunstancias, incluido Los Ángeles. Los expertos en salud han recomendado el uso de máscaras faciales después de desalentar inicialmente al público de usarlas, por preocupación por la escasez de profesionales médicos que tratan a pacientes con coronavirus.
Cuomo también dio un resumen de cómo comenzaría a reabrir negocios, comenzando con los más esenciales y aquellos en los que el riesgo de propagación de la infección era menor.
Con evidencia de que el brote se está desacelerando en estados como Nueva York, los líderes políticos se han involucrado en un agrio debate sobre cuándo tratar de reabrir la economía sin allanar el camino para una segunda ola mortal de infecciones.
Los gobiernos estatales y locales han emitido órdenes de «quedarse en casa» o «refugiarse en el lugar» que afectan al 94% de los estadounidenses para frenar la propagación de la COVID-19, la enfermedad respiratoria causada por el virus.
CALAMIDAD ECONOMICA
Las restricciones han golpeado la economía de EE.UU., con cierres comerciales obligatorios destinados a frenar la propagación del patógeno, dejando a millones de estadounidenses desempleados.
Nuevos datos del gobierno publicados el miércoles dieron otro vistazo al daño. Las ventas minoristas cayeron un 8,7% en marzo, informó el gobierno, la mayor disminución desde que comenzó el seguimiento en 1992. El gasto del consumidor representa más de dos tercios de la actividad económica de Estados Unidos.
Además, la producción en las fábricas de EE.UU. disminuyó en su mayor porcentaje desde 1946 debido a que la pandemia fracturó las cadenas de suministro.
Los economistas creen que la economía entró en recesión en marzo.
«La economía está casi en caída libre», dijo Sung Won Sohn, profesor de economía empresarial en la Universidad Loyola Marymount en Los Ángeles.
Trump, quien inicialmente minimizó la amenaza del coronavirus y luego pidió una reapertura de la economía para el 12 de abril, ahora ha aceptado la fecha objetivo del 1 de mayo.
«Hay una serie de estados, 19, 20 estados, que realmente han tenido un impacto limitado. Por lo tanto, creo que veremos algunos estados que están, los gobernadores sienten que están listos, estamos preparados para ayudarlos con esa reapertura «, dijo Robert Redfield, director de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU., en el programa » Good Morning America» de la cadena de televisión ABC.
Los trabajadores de la salud se han enfrentado a amenazas de salud únicas mientras trabajan en la primera línea tratando de enfrentar la pandemia. Reuters ha identificado a más de 50 enfermeras, médicos y técnicos médicos que murieron después de haber sido diagnosticados con la COVID-19 o mostrar síntomas de la enfermedad. Al menos 16 estaban en el estado de Nueva York.
«La sala de emergencias es como una zona de guerra», dijo Raj Aya, cuya esposa Madhvi Aya, asistente médica en Brooklyn, fue uno de los trabajadores de la salud que murió en Nueva York.