Durante varias semanas fue la demanda más frecuente al presidente Andrés Manuel López Obrador: ante la pandemia de coronavirus, era necesario que el gobierno aplicara un plan especial para atender la crisis económica por la emergencia sanitaria.
Pero el plan de reactivación económica que presentó el domingo AMLO, como se conoce al mandatario en el país, desató polémica.
López Obrador ofreció una serie de acciones como proyectos de obras públicas, créditos sin intereses, reducción del sueldo de altos funcionarios, becas para estudiantes, adelanto la pensión para ancianos y la creación, en 9 meses, de 2 millones de nuevos empleos.
Organizaciones empresariales, analistas y consultores de finanzas cuestionaron la propuesta presidencial.
«El plan de reactivación económica que escuchamos es decepcionante«, advirtió el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
Y otros como Valeria Moy, directora de la organización civil México Como Vamos, afirman que la estrategia oficial «es una oportunidad perdida» para atenuar las consecuencias económicas de la pandemia.
Hay pocos elementos nuevos en el plan oficial dice . «Son programas que ya había anunciado», afirma.
«No sabemos si son apoyos nuevos o son parte del presupuesto que ya se ejerce. No hay claridad de cuánto es el monto que se va a utilizar, en dónde y de qué parte salen los recursos».
Días antes que López Obrador presentara su plan económico, algunas organizaciones empresariales y especialistas insistieron en que se necesitaba una estrategia de apoyo a las empresas, inclusive con estímulos fiscales.
Eso no se incluye en la propuesta presidencial, e inclusive López Obrador insiste en que su estrategia no contempla rescatar a grandes empresas con problemas financieros como, según afirma, ocurrió en gobiernos anteriores.
Refinería, caminos y austeridad
Parte de la polémica por el plan de reactivación económica de AMLO, afirman especialistas, es que no incluye acciones para evitar la pérdida de empleos.
La estrategia, afirman, se concentra en los programas sociales que ya se aplican actualmente como la pensión para adultos mayores que se entregó por adelantado hace varias semanas.
También implica crear nuevos empleos a partir de acciones que ya existen, como el programa Sembrando Vida, que contempla plantar millones de árboles de maderas preciosas en el sureste del país, por ejemplo.
Es una de las estrategias para cumplir el objetivo de crear 2 millones de empleos en 9 meses.
Otra fuente de puestos de trabajo será la construcción de la refinería de Dos Bocas en Tabasco, así como el Tren Maya en la Península de Yucatán.
También se pretende aumentar los programas para construir caminos asfaltados en comunidades indígenas, así como aumentar el financiamiento público para construir viviendas.
Otra parte de la estrategia de AMLO contra la crisis económica por la pandemia es que no se autorizarán incrementos en el precio de combustibles como gasolina y diésel.
También se contempla recortar gastos en el gobierno. Una de las acciones de la nueva estrategia es cancelar el pago de aguinaldos a los altos funcionarios del gobierno federal.
Con tal estrategia se podrían ahorrar, afirma López Obrador, más de 3.000 millones de pesos (unos US$120 millones).
«Esperaban otra cosa»
El plan de López Obrador no fue bien recibido por organizaciones empresariales.
Uno de los críticos es el presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), Francisco Cervantes Díaz.
La estrategia del gobierno, insiste, «no es lo que esperaban los empleadores, lo que necesitan».
«Las consecuencias pueden ser graves», asegura.
Algo parecido señaló el Consejo Coordinador Empresarial, el organismo que reúne a la mayor parte de las organizaciones del sector privado en el país.
La estrategia presidencial, señala en un comunicado, «nos parece una respuesta incompleta ante la gran dimensión de la crisis que enfrentamos».
«Estaban esperando otras cosas», responde López Obrador. «Están acostumbrados a que se rescate a los de arriba, que no se les cobren impuestos, que aumente el precio de las gasolinas como era antes».
Eso no va a ocurrir, insiste.
«No va haber condonación de impuestos, no va a haber rescate a grandes empresas, bancos, mucho menos para los grandes».
fuente.bbcmundo