Las mujeres que sufren de vaginosis bacteriana (VB) – una infección vaginal maloliente que las pone en riesgo de contraer enfermedades de transmisión sexual, altera su autoestima y puede causar problemas en sus relaciones o infertilidad – pueden tener una cura.
Científicos del la Universidad Hebrea de Jerusalén y el Instituto Weizmann de Ciencias han desarrollado el primer trasplante de secreción vaginal, conocido como trasplante de microbioma vaginal.
Microbioma es la composición de todos los microbios, como bacterias, hongos, protozoos y virus, que viven dentro del cuerpo humano.
El estudio recientemente publicado en la revista Nature Medicine fue dirigido por el Dr. Ahinoam Lev-Sagie de la Universidad y el Prof. Eran Einav del Instituto Weizmann.
Lev-Sagie, especialista en trastornos vaginales explica que un alto porcentaje de las pacientes con VB vuelven a consulta en el transcurso del año con la misma dolencia pese a los antibióticos.
“La afección afecta a unas 80 millones de mujeres en todo el mundo”, agregó.
Luego, hace cinco años, la Dra. Debra Goldman-Wohl, uno de sus asociados de laboratorio, tomó nota del trasplante de microbios fecales, que ahora se considera un tratamiento de primera línea para las infecciones graves adquiridas en el hospital, como el Clostridium difficile en pacientes internados. En otras palabras, transplante de heces.
“Suena asqueroso”, dijo Lev-Sagie, “pero Goldman-Wohl comenzó a pensar que tal vez se podría desarrollar un nuevo enfoque para la VB basado en principios similares. La investigación de la Universidad Hebrea Y Weizmann fue el primer estudio exploratorio realizado con este procedimiento en humanos”.
El enfoque consiste en el trasplante de un microbioma vaginal recolectado de donantes sanos a pacientes que sufren de VB intratable, con el objetivo de reemplazar su microbioma impulsor de la enfermedad por el de una mezcla normal de bacterias que revierte los síntomas de la enfermedad, explicaron los investigadores en un comunicado.
Después de un tratamiento preventivo con antibióticos, que elimina parcialmente el nicho de las bacterias causantes de la enfermedad, cinco pacientes con VB intratable recibieron trasplantes vaginales de microbioma (TMV). Tras un seguimiento de dos años, la afección desapareció en cuatro de las cinco pacientes.
La quinta paciente requirió un cambio de donante para lograr una remisión completa y duradera.
“Creemos que la aplicación de mayores dosis de TMV en ensayos futuros y la información sobre la selección de donantes, podría permitirnos optimizar el emparejamiento de donante-receptor y mejorar las probabilidades de éxito total de este tratamiento”, explicó Lev-Sagie. “Los resultados fueron increíbles.”
En dos pacientes el cambio fue inmediato: Después de una semana, se curaron completamente.
Además del innovador trasplante, el equipo identificó una mezcla de comensales de “cepa central” que podría impulsar este impacto clínico y desarrollarse aún más hasta convertirse en un “cóctel microbiano” que permita simplificar este procedimiento y reducir sus costos, al proporcionar un primer tratamiento.
El equipo no observó efectos secundarios asociados con la TMV durante el estudio, pero dijo que habría que hacer que continuar la exploración para descartar cualquier riesgo, como la probabilidad de transferir un patógeno o causar un embarazo no deseado debido a la transferencia de esperma.
Próximamente, se realizará un ensayo aleatorizado, controlado y multicéntrico para probar el cóctel de microbios en grupos más grandes de mujeres que sufren de VB severa en diferentes países.
“Los temas relacionados con la salud de la mujer a menudo han sido poco estudiados e incluso descuidados en la medicina clínica”, señaló Lev-Sagie. “La vaginosis bacteriana, aunque no pone en riesgo la vida, es un trastorno femenino extremadamente común que afecta gravemente la vida de las mujeres.”
“Creo que es sorprendente que nosotros, como médicos, tengamos la opción de ofrecer a la gente algo que puede cambiar sus vidas”, concluyó.
Fuente: The Jerusalem Post