Científicos ponen a prueba aditivos al pan, para darle propiedades protectoras a largo plazo contra algunas de las enfermedades más comunes.
Uno de los elementos básicos de la dieta occidental está siendo reinventado por investigadores, en la Universidad de las Ciencias de la Vida, en Wroclaw, quienes buscan recetas para hacer del pan, algo más que un elemento esencial de nuestro desayuno.
El profesor Zygmunt Gil pone a prueba diferentes ingredientes que, él cree, proveerán protección contra enfermedades como la diabetes y el cáncer.
Lo hace añadiendo varios ingredientes a la masa, de una manera que preserven su valor nutricional, durante el proceso del horneado, manteniendo a la vez, el sabor original del pan.
Frutas secas y yerbas son añadidas, no por su sabor sino por sus propiedades de prevención de enfermedades, a largo plazo.
“Será una pastilla que, aparte de sus nutrientes básicos, incluirá además ingredientes no nutricionales importantes desde un punto de vista fisiológico. Se trata de componentes como fibra, compuestos polifenólicos, que son importantes en la prevención de enfermedades de estilo de vida, como la obesidad y enfermedades relacionadas con la diabetes. Estos componentes tienen la intención de prevenir la formación de procesos cancerígenos o que deterioran nuestra salud”, explica el profesor Gil de la Universidad de las Ciencias de la Vida Wroclaw.
Lo que normalmente se considera desperdicios, como los remanentes sólidos y la pulpa de la fruta, productos de la extracción de jugo, son congelados en seco.
Estos, a su vez, se muelen finamente y luego son añadidos al pan previo al horneado.
De acuerdo al equipo de Gil, a los diferentes métodos de preparar pan se le añaden ingredientes como manzana, extracto de cacao, coco, cebolla, repollo colorado y muchos distintos tipos de semillas, como la avena y la linaza.
El profesor Gil quiere que pensemos en el pan del futuro como una pastilla, que comemos cada día, sin tener que pensar en sus propiedades.
fuente:voanoticias