El primer ministro, Biniamín Netanyahu, negó decididamente que haya estado desbaratando los esfuerzos para trasladar la Embajada de Tel Aviv a Jerusalén, luego que un alto activista republicano en Israel acusara al titular del Ejecutivo de estar parando la movida.
Marc Zell, jefe de la filial del Partido Republicano en Israel, manifestó en una entrevista ofrecida a la Radio del Ejército (Galei Tzáhal) que la Administración Trump está esperando que la Oficina de Netanyahu apruebe la relocalización de la Embajada.
“En el minuto que Jerusalén de luz verde, la embajada será trasladada definitivamente a Jerusalén”, expresó Zell a la radio. “Necesitamos cerrar el consulado general con todas sus implicaciones y poner el cartel de la Embajada en Jerusalén”.
Posteriormente, en subsecuentes entrevistas Zell pareció retractase indicando que sus declaraciones estaban basadas exclusivamente en su evaluación personal y no oficial.
La Oficina de Netanyahu rechazó esas opiniones, indicado que la afirmación de que Jerusalén había pedido una postergación es un “delirio”.
“Lo contrario es cierto. La posición de Israel sobre este asunto es conocido: Jerusalén es la capital de Israel y la embajada de Estados Unidos, como todas las demás embajadas deberían estar en Jerusalén”, reza el comunicado de la Oficina del Primer Ministro.
En la reunión semanal del Gabinete, Netanyahu añadió que todos los países deberían trasladar sus embajadas a Jerusalén.
“La posición de Israel ha sido, y siempre será, que la Embajada de Estados Unidos debería estar aquí, en Jerusalén”, afirmó Netanyahu. “Es apropiado que todas las otras embajadas también sean trasladadas a Jerusalén”.
fuente:Aurora