En entrevistas con la televisión israelí, el director ejecutivo de Pfizer, Albert Bourla, pronosticó este sábado que el mundo volverá casi a la normalidad en pocos meses y reveló que la farmacéutica estadounidense tiene como objetivo producir cada año una vacuna que cubra todas las variantes de COVID-19, recogió The Times of Israel.
“Una vez al año es más fácil convencer a la gente de vacunarse. Es más fácil que la gente se acuerde. Desde el punto de vista de la salud pública, es una solución ideal. Estamos tratando de ver si podemos crear una vacuna que cubra Ómicron sin olvidar las otras variantes. Esa podría ser una solución, a menos que salga algo completamente diferente”, dijo al Canal 12 israelí.
“El virus no será erradicado. El virus estará con nosotros durante años”, aseguró Bourla.
Sin embargo, añadió que “podríamos volver a la vida normal en unos meses, con anomalías como Ómicron que podremos controlar”.
Indicó que Pfizer está trabajando en una vacuna contra Ómicron, pero estimó que “habrá más variantes”.
“Este virus tiene la tendencia a crear nuevas variantes y a escapar de la protección inmunitaria, ya sea de las vacunas o de protecciones naturales”, dijo.
A diferencia de otras variantes hasta la fecha, Bourla dijo que “solo Omicron” fue capaz de eludir la protección contra la enfermedad proporcionada por las vacunas, pero subrayó que la inoculación sigue siendo eficaz para prevenir hospitalizaciones.
Bourla dijo a la cadena de televisión que es constantemente blanco de activistas antivacunas que publican información falsa sobre él en Internet y le envían cartas amenazantes.
En una entrevista separada al Canal 13 israelí, señaló que “hay una pequeña minoría de personas que se benefician de la circulación de información errónea”.
“Lo saben todo muy bien; simplemente distribuyen esta desinformación como una forma de vida; son delincuentes”, acusó.
Dijo que activistas antivacunas afirmaron falsamente que su esposa había muerto porque fue obligada a vacunarse, lo que le hizo apresurarse para llamar a sus hijos y a sus suegros y hacerles saber que todo estaba bien.
“Pero ese es el menor de los daños. Lo más importante es que la gente se cree esas cosas y la mayor parte de los decesos son de personas no vacunadas”, continuó.
“Millones de personas han muerto por su culpa, este pequeño número de criminales”, apuntó Bourla.
Al comentar sus vínculos con líderes israelíes, dijo al Canal 12 que desarrolló “relaciones muy cordiales con Bibi [Netanyahu] antes y [el primer ministro] Naftali [Bennett] ahora”. Añadió que ha seguido en contacto con Benjamín Netanyahu.
“Sé que en Israel… hay una política que a veces divide. Para nosotros, los judíos de fuera, está Israel. No hay un partido o el otro. Sentimos que Israel es un puerto seguro al que siempre podemos acudir. Así que para nosotros, Israel es muy importante”, expresó Bourla.
Agregó que sea quien sea el primer ministro, “para mí es muy importante que acuda a la llamada inmediatamente”.
Las entrevistas se producen días después del anuncio de la Fundación del Premio Génesis de que Bourla fue seleccionado para recibir el galardón. El presidente Yitzhak Herzog le entregará el premio de un millón de dólares en una ceremonia que se celebrará en Israel el 29 de junio.
El año pasado, Bourla fue honrado en la ceremonia oficial por Yom Haatzmaut en el Monte Herzl de Jerusalén.