Eliyahu David Kay fue identificado como la víctima del atentado en la Ciudad Vieja de Jerusalén este domingo, llevado a cabo por un terrorista de Hamás, informó Ynet.
Otros dos ciudadanos y dos agentes de la Policía de Fronteras resultaron heridos en el tiroteo ocurrido esta mañana.
Kay, de 26 años, era inmigrante de Sudáfrica. Trabajaba como guía turístico para la Fundación del Patrimonio del Muro de los Lamentos. Estaba comprometido y planeaba casarse en seis meses.
La Fundación del Patrimonio del Muro de los Lamentos dijo en un comunicado que sus integrantes están consternados por el asesinato de Kaye mientras se dirigía al trabajo.
“Era amable con todos y cumplía fielmente con sus deberes”, decía el comunicado.
Kay sufrió múltiples heridas de bala, incluidos disparos mortales en la cabeza, y a pesar de los esfuerzos de los equipos de emergencia, fue declarado muerto al llegar al hospital.
Nació y creció en Johannesburgo y se trasladó a Israel por su cuenta en 2017 para servir en las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI). Se ofreció como voluntario para Majal, un programa más corto que el servicio regular, diseñado para soldados que planean regresar a sus países de origen. Sin embargo, decidió quedarse en Israel y emigró oficialmente en 2019.
Sus hermanos también sirvieron como soldados solitarios en el ejército israelí. Sus padres y su hermana menor hicieron aliá el pasado diciembre y se trasladaron a la ciudad de Modi’in en el centro de Israel.
Estudió en la Yeshiva Tomjai Tmimin en Kiryat Gat antes de alistarse en las FDI en 2018. El decano de la yeshivá, el rabino Reuben Schneersohn, elogió a Kay como “un chico maravilloso, lleno de sonrisas y de una buena familia que quería añadir el estudio de la Torá a su vida”.
El terrorista, Fadi Abu Shkhaydam, de 42 años, residente del campo de refugiados Shuafat, en Jerusalén, fue abatido por las fuerzas de seguridad y murió en el lugar.
El ministro de Seguridad Pública, Omer Barlev, dijo que el atacante era miembro del grupo terrorista Hamás. Estimó que el ataque fue planeado con anticipación ya que la familia del agresor había huido del país a Jordania días antes del atentado.
El presidente Yitzhak Herzog, quien se encuentra en una visita de Estado en el Reino Unido, condenó el atentado y pidió a la comunidad internacional reconocer al brazo político del grupo islamista como organización terrorista.
Herzog ofreció sus condolencias a la familia de Kay y deseó una pronta recuperación a los heridos en el ataque.
Anteriormente, el primer ministro Naftali Bennett ordenó aumentar la presencia policial en Jerusalén para evitar nuevos ataques.
El mandatario expresó sus condolencias a la familia de la víctima y elogió la labor de las fuerzas de seguridad que respondieron al tiroteo. Añadió que este incidente es el “segundo ataque terrorista reciente en Jerusalén”, tras el ataque con arma blanca de la semana pasada en la Ciudad Vieja, en el que resultaron heridos dos agentes de la Policía de Fronteras. El sospechoso, un joven de 16 años de Jerusalén Este, fue abatido en el lugar de los hechos.
Kay es el décimo inmigrante de Sudáfrica que muere en un atentado en Israel desde la fundación del Estado.
La ministra de Inmigración e Integración, Pnina Tamano-Shete, expresó sus condolencias en un comunicado y aseguró que su personal hará todo lo posible por ayudar a la familia en su momento de necesidad.