El gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo, informó que la entidad mexiquense pasa del semáforo rojo por COVID-19 a naranja.
“La próxima semana el Estado de México pasa a semáforo naranja”, dijo del Mazo en un mensaje en video publicado en sus redes sociales.
En el Estado de México, el ritmo de contagios ha comenzado a disminuir, al igual que el número de hospitalizados, precisó.
Como resultado del paso a semáforo naranja, a partir del lunes 15 de febrero se permitirá la ampliación de aforos, horarios y días de operación en los establecimientos que ya operaban en semáforo rojo, señaló.
Comercios, plazas y centros comerciales operarán con un aforo del 30 por ciento, todos los días de la semana y hasta las 9 p. m.
Los restaurantes operarán con un aforo del 30 por ciento en interiores y del 40 por ciento en exteriores, todos los días y hasta las 10 p. m.
Centros nocturnos, salones de fiestas y eventos masivos continuarán sin permiso de operación.
Del Mazo se comprometió a continuar con un balance para proteger tanto la salud pública como la economía e instó a una responsabilidad con las normas sanitarias para tener una reactivación segura.
“Es momento de seguir siendo cuidadosos y de mantener las medidas preventivas. Sigamos cuidando la salud de nuestras familias, en especial, de los adultos mayores. Es momento de seguir cuidando todos de todos”, concluyó.
Junto con el Estado de México, la Ciudad de México también anunció su paso del semáforo rojo al naranja este mismo día.