El presidente Trump ha conseguido instalar un nuevo juez en la Corte Suprema. Ya son tres de los nueve que conforman el máximo tribunal. La oposición se ha opuesto a su nombramiento debido a la proximidad con las elecciones.
WASHINGTON, D.C. – El pleno del Senado confirmó este lunes, en una votación marcada por la disciplina de partido, que la jueza Amy Coney Barrett será quien ocupe la vacante dejada por el fallecimiento de la magistrada Ruth Bader Ginsburg en el Tribunal Supremo de Estados Unidos.
A pesar de que algunos legisladores republicanos habían dicho que se opondrían al nombramiento debido a la proximidad de los comicios presidenciales, que tendrán lugar el próximo 3 de noviembre, finalmente tan solo la senadora Susan Collins, se unió a la oposición, confirmando el resultado final de 52 votos a favor y 48 en contra.
Coney Barrett se convertirá así en el tercer juez de la máxima corte nombrado por el presidente Donald Trump, tras las confirmaciones de Neil Gorsuch y Brett Kavanaugh. Está previsto que el mandatario celebre una ceremonia en honor de Barrett este mismo lunes, en la Casa Blanca.
(Noticia en desarrollo)