La Comisión Judicial del Senado aprobó el jueves celebrar la votación sobre la nominada del presidente Donald Trump a la Corte Suprema, Amy Coney Barrett, el 22 de octubre.
La votación se dio en medio de acusaciones por parte de los republicanos al Partido Demócrata, de oposición, de querer boicotear a la nominación, ya que solo había un demócrata presente cuando el presidente del comisión, Lindsey Graham, inició el proceso. Los demócratas, que se oponen a la candidatura de Barrett, una jueza federal, rechazaron los señalamientos.
De ser confirmada por el comité la próxima semana un escenario esperado dado que los republicanos son mayoría (12-10), la nominación de Barrett pasará al pleno del Senado.
En sus testimonios iniciales, los senadores demócratas criticaron las respuestas que Barrett dio sobre temas crucial como el aborto, el cambio climático o los derechos LGTBQ. Durante los dos días de testimonio, Barrett evadió dar su postura, alegando que comprometería su ética como jueza.
“¿Cuál fue el propósito de esta audiencia si llegamos a un punto ahora donde no sabemos realmente lo que ella piensa sobre ningún tema?”, dijo el legislador demócrata por el estado de Illinois, Dick Durbin. “Temo que si le pregunto por la existencia de la gravedad en la tierra, declinaría responder”, añadió.
El senador Graham defendió a la candidata del presidente, alegando que fue «increíblemente directa» durante la audiencia y acusó a los demócratas de centrarse en aspecto ajenos a sus aptitudes.
«Cualquiera que dude sobre el cambio climático es raro en su mundo. Están tratando de convertirla en algo que no es», dijo el republicano.
Los demócratas se quejaron de que los republicanos del Senado procedieran con el proceso de confirmación del candidato de Trump tan cerca de una elección después de negarse a actuar sobre el candidato a la Corte Suprema de 2016 del presidente demócrata Barack Obama porque era un año de elecciones.
La senadora demócrata Amy Klobuchar dijo que los estadounidenses quieren que el ganador de las elecciones decida quién llena la vacante de la corte creada por la muerte de la jueza liberal Ruth Bader Ginsburg.
Klobuchar dijo que el Senado debería actuar sobre el paquete de estímulo en medio de la pandemia de coronavirus en lugar de la confirmación de Barrett.
A pesar de algunos momentos tensos, la audiencia se llevó a cabo en gran medida con un tono agradable. Contrastaba con las controvertidas audiencias de confirmación de Kavanaugh en 2018 en las que negó airadamente las acusaciones de agresión sexual.
Al final, Graham les dijo a los senadores demócratas: «ustedes han desafiado al juez, nos han desafiado a nosotros, y acepto esos desafíos como sinceros y no personales. No creo que nadie haya cruzado la línea con el juez en términos de degradarla como persona».
La principal demócrata del comité, la senadora Dianne Feinstein, elogió a Graham por la forma en que condujo la audiencia. Si se confirma, Barrett podría estar en la Corte Suprema a tiempo para participar en un caso el 10 de noviembre en el que Trump y los estados liderados por republicanos buscan invalidar la ley Obamacare de 2010, formalmente llamada Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio.
La Comisión Judicial del Senado de Estados Unidos concluyó el jueves cuatro días de audiencias sobre Barrett interrogando a expertos, incluidos dos de la Asociación de Abogados de Estados Unidos, que la considera «bien calificada» para el puesto.
La jurista, de 48 años, enfrentó el miércoles su segundo día de cuestionamientos por parte de los senadores, después de una larga sesión el martes donde evadió las preguntas de los legisladores sobre temas clave como los derechos reproductivos, la Ley de Cuidado de Salud Accesible, más conocida como Obamacare, y las elecciones.
Los demócratas dijeron que los republicanos estaban presionando para sentar a Barrett a tiempo para que esté presente en un caso el 10 de noviembre en el que el presidente Donald Trump y los estados liderados por los republicanos buscan invalidar la ley Obamacare de 2010 llamada formalmente Ley de Cuidado de Salud Asequible (ACA).
Durante su presencia en el Senado esta semana, Barrett les ha dicho a los miembros del Comité Judicial que llevaron a cabo su audiencia de confirmación que no dejaría que sus puntos de vista personales y religiosos determinen cómo decidiría los casos.
«No tengo una agenda», dijo Barrett el martes. «Seguiré la ley».
Si Barrett recibe el visto bueno de la Comisión Judicial, se procederá a un voto en el pleno del Senado. Los republicanos tienen una mayoría de 53-47 en la Cámara Alta, lo que deja a los demócratas con poca o ninguna posibilidad de evitar la confirmación de Barrett.
De ser elegida, los demócratas temen que Barrett inclinará aún más la balanza de la corte hacia el lado conservador (6-3), afectando las decisiones del tribunal por años. Barrett es jueza federal en Illinois y fue profesora de derecho en su alma máter, la Universidad de Notre Dame.
Se espera que los demócratas invoquen las reglas del comité para impulsar una votación final sobre la nominación de Barrett una semana antes del 22 de octubre. Una votación en el pleno del Senado podría llegar a fin de mes.