Los partidos políticos que participarán en las eleccciones del próximo 18 de octubre cerraron sus campañas con diferentes actividades y acatarán el silencio electoral que rige desde este jueves.
LA PAZ – Bolivia entró este jueves en el denominado “silencio electoral”, un período de tiempo en el que la ley electoral prohíbe actos proselitistas, propaganda política y el llamado al voto, con el objetivo de darle al elector un espacio de reflexión.
En las últimas horas, los candidatos a la presidencia de Bolivia cerraron sus campañas en diferentes partes del país con consignas triunfalistas, caravanas, masivas, concentraciones y hasta lágrimas durante los discursos.
Luis Arce, candidato del Movimiento Al Socialismo, el partido del expresidente Evo Morales, y favorito en la preferencia del electorado según las encuestas, dijo que ganará con el 50% de los votos.
La Constitución y la ley electoral de Bolivia indican que para ganar en primera vuelta se debe obtener el 50% más uno de los votos, o el 40% con una ventaja de 10 puntos porcentuales sobre el segundo más votado.
“Pensaron que iban a matar al Movimiento Al Socialismo y aquí en El Alto les decimos, aquí estamos y estamos vivos”, dijo Arce.
El candidato de Comunidad Ciudadana, Carlos Mesa, segundo en la intención de voto, optó por un cierre online para agradecer el apoyo de sus seguidores, mientras Luis Fernando Camacho de Creemos y tercero en la preferencia electoral, congregó a una multitud en Santa Cruz.
“Lo que hoy tenemos es un cabildo andando y la valentía de nuestro pueblo”, dijo Camacho.
En la recta final a las elecciones, la polarización política sube de nivel y crece la incertidumbre por posibles conflictos tras la jornada de votación.
“Cuando hablo con la gente aquí puedo sentir que aún hay mucha preocupación por un posible estallido de violencia”, dijo el embajador de la Unión Europea, Michael Dóczy.
Sin embargo, José Antonio de Gabriel, uno de los enviados del Centro Carter de Estados Unidos, dijo tras reunirse el miércoles con el presidente del Tribunal Supremo Electoral, Salvador Romero, que ve el proceso electoral con bastante confianza.
Las elecciones del 18 de octubre son clave para pasar la página de la crisis política tras los comicios del 20 de octubre de 2019, en las que se alzó como ganador Evo Morales y después fueron declaradas fraudulentas.
Morales terminó renunciando en noviembre de ese año y exiliándose primero en México y luego en Argentina, en medio de masivas protestas que enfrentaron a los bolivianos de varias tendencias.