El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, dijo el jueves que los informes de la presencia de cientos de embarcaciones chinas cerca de las Islas Galápagos resultan «profundamente preocupantes».
A comienzos de agosto la Armada del Ecuador reportó que mantenía vigilancia de una gran flota pesquera china que opera cerca de las aguas protegidas del Archipiélago de Galápagos, en medio de la preocupación por el impacto ambiental de la pesca en las islas.
«Los informes de más de 300 barcos chinos cerca de las Galápagos que desactivan los sistemas de rastreo, cambian los nombres de los barcos y dejan desechos marinos son profundamente preocupantes», tuiteó Pompeo, pidiendo a China que «sea transparente y haga cumplir su propia política de tolerancia cero sobre la pesca ilegal».
«Es hora de que China detenga sus prácticas pesqueras insostenibles, el incumplimiento de las reglas y la degradación ambiental deliberada de los océanos. Apoyamos a Ecuador y pedimos a Beijing que deje de participar en la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada», advirtió Pompeo.
La Marina ecuatoriana dijo a comienzos de este mes que en un patrullaje que incluyó un paso elevado de la zona donde pescan los enormes barcos y un reconocimiento con lanchas guardacostas, constataron que en el área hay un total de 340 embarcaciones. La cifra es superior al mes anterior, cuando se contabilizaron 260, según el organismo ecuatoriano.
Imágenes tomadas como parte del paso elevado, que incluyó a periodistas, mostró que al menos uno de los buques parecía viejo y necesitaba mantenimiento.
Los medios han reportado que las embarcaciones pasan varias semanas pescando frente a las costas de Perú antes de llegar a la zona de Galápagos.
La flota china está presente desde 2017 en los meses de verano en las afueras de la Zona Económica Exclusiva de Galápagos, atraída por especies marinas como el calamar gigante o el tiburón martillo.
Esta pesca no es ilegal porque tiene lugar en aguas internacionales, pero los ambientalistas dicen que permite a la flota china aprovechar las abundantes especies que salen de las islas y cruzan hacia altamar.
China ha prometido una política de «cero tolerancia» frente a los barcos y autorizó que el país andino supervise a sus barcos. También propuso una moratoria de pesca en las zonas cercanas a Galápagos entre septiembre y noviembre. Las flotas pesqueras suelen salir del área antes de ese periodo.