Israel aprobó nuevos pasos en su proceso de desconfinamiento tras la estabilización de la epidemia de COVID-19 en su territorio.
El gobierno aprobó por votación telefónica este martes el levantamiento de varias restricciones impuestas para frenar la propagación del coronavirus en el país, de acuerdo con The Jerusalem Post.
Los restaurantes, bares y restaurantes podrán servir a clientes que pueden consumir sus productos dentro de sus instalaciones a partir del miércoles, si bien bajo específicas medidas sanitarias. Además, se permitirá la reapertura de albercas y atracciones turísticas.
En un mensaje con motivo de esta nueva medida aprobada, Netanyahu dijo que “queremos ayudar a la economía”, pero también “facilitarles la vida, permitirles salir, volver a la normalidad, tomar una taza de café, un vaso de cerveza también, así que primero todos diviértanse”.
Netanyahu advirtió que su administración vigila la epidemia del coronavirus y que “actuarán de conformidad. Espero que no tengamos que cambiar nada”.
Para los restaurantes que pueden servir a más de 100 personas, se les permitirá una capacidad máxima de 85 por ciento de los clientes. Las mesas deberán de estar a 1.5 metros de distancia y la temperatura de los clientes deberá de tomarse antes de su ingreso, entre otras disposiciones sanitarias.
Las albercas deben mantener una proporción de una persona por cada 6 metros cuadrados de superficie de la alberca.
Se impondrán multas de hasta 5,000 nuevos shequels a las empresas que no cumplan con las regulaciones del Ministerio de Salud.
Además, se ha permitido que hasta 70 personas puedan estar en un servicio religioso, siempre y cuando los devotos usen cubrebocas y mantengan 2 metros de distancia entre cada uno, entre otros alivios en cuanto congregaciones y movimiento de personas.