A pesar que que la OMS teme un “rebrote mortal” del coronavirus si se levanta demasiado rápido el confinamiento, algunos países ya están olvidando sus cuarentenas.
En El Salvador la cuarentena decretada por el Gobierno termina el 28 de abril y la Asamblea Legislativa aprobó extender la declaratoria de emergencia por cuatro días más. La prórroga para el el decreto 593 fue aprobada con 68 votos. Ahora los diputados sesionaría para analizar si extiende por 30 días más las restricción de garantías constitucionales.
Además, el Ejecutivo ha propuesto que se limite la circulación por zonas y horas ante emergencia por el COVID – 19.
El Salvador se ha sumado a muchos países más que han actuado de esta formar ante la pandemia para evitar la propagación desmedida del virus, incluso se han tomado medidas mucho antes que otros países. Algunos como Austria, República Checa, Dinamarca y Noruega ya están levantando las medidas de aislamiento y restricciones de circulación, sin embargo, no se considera que esta sea una buena opción.
El doctor Hans Kluge, director regional de la Organización Mundial de la Salud para Europa, advirtió esta semana que la situación europea sigue siendo “muy preocupante” e insistió en que “ahora no es el momento de relajar las medidas”.
También, un estudio basado en el brote de China y publicado en la revista médica The Lancet, señaló que los aislamientos no deben ser levantados completamente hasta que se encuentre una vacuna contra el virus.
Los países que están reabriendo y cómo lo hacen:
República Checa
El jueves 9 de abril autorizó la reapertura de algunos comercios, como grandes tiendas de bricolaje, ferreterías y establecimientos de venta de equipamiento de ocio, y relajó también algunas limitaciones impuestas sobre actividades deportivas.
De esta forma, han reabierto también centros de deporte al aire libre, donde los usuarios no tienen obligación de usar mascarilla y deben mantener una distancia de dos metros entre ellos, si bien permanecerán cerrados los vestuarios. También se volverán a permitir actividades en solitario al aire libre sin mascarilla, como andar en bicicleta o correr.
La reapertura de los negocios se realiza con estrictas medidas de higiene, con geles desinfectantes a disposición de la clientela y una distancia de seguridad.
El estado de emergencia declarado el 12 de marzo se prolongó hasta el 30 de abril y es obligatorio el uso de mascarillas o una prenda que cubra boca y nariz, como una bufanda, al salir a la calle.
En la nación con 10,6 millones de habitantes han fallecido hasta la fecha 104 personas como consecuencia del COVID-19 y 5,335 han sido confirmados como positivos.
Desde el pasado 14 de marzo se han cerrado los negocios no esenciales, y, aunque los restaurantes siguen cerrados, se les permite la entrega a domicilio.
Los mayores de 65 años que no están en residencias pueden ir a comprar en supermercados entre las 8 y 10 de la mañana, un horario reservado exclusivamente para ellos.
Dinamarca
La nación nórdica que ha registrado 4,875 infecciones y 187 muertes relacionadas con el COVID-19 va a levantar gradualmente las restricciones comenzando con la reapertura de guarderías, jardines de infantes y escuelas primarias a partir del 15 de abril.
La primera ministra Mette Frederiksen dijo que según las autoridades sanitarias “es apropiado y justificado iniciar una apertura lenta”. Pero con la condición de que todos mantengan su distancia y se laven las mano.
La reapertura de las escuelas tendrá lugar gradualmente, con los jardines de infancia y las escuelas primarias abriendo a partir del 15 de abril y las escuelas medias y secundarias esperando hasta el 10 de mayo, dijo Frederiksen en una conferencia de prensa el lunes.
Los bares, restaurantes, clubes nocturnos, centros comerciales, peluquerías y salones de masaje permanecerán cerrados, y las reuniones de más de 10 personas siguen prohibidas.
Los cierres fronterizos siguen en vigor y no se recomienda viajar al extranjero. Las grandes reuniones están prohibidas hasta agosto.
Noruega
El gobierno de la primera ministra Erna Solberg reabrirá guarderías, escuelas y algunos pequeños comercios.
Las guarderías podrán abrir de nuevo a partir del 20 de abril, mientras que las escuelas (para alumnos de hasta cuarto grado) lo harán una semana después, al igual que los institutos u otras enseñanzas superiores para los alumnos de último curso.
Servicios sanitarios especiales como consultas de psicólogos y fisioterapeutas, así como clínicas de masaje o peluquerías podrán volver a funcionar en el último tramo de este mes, siguiendo medidas para evitar el contagio.
Las restricciones que afectan al cierre de establecimientos como bares y restaurantes, la prohibición de concentraciones de más de cinco personas o el cierre de fronteras se mantendrán.
Noruega, que tiene una población de 5,4 millones, ha registrado hasta el momento 5,700 casos de COVID-19 y 71 muertos, con un descenso continuo en los últimos días en el número de ingresos hospitalarios.
Austria
El gobierno austríaco presentó el 6 de abril una cautelosa hoja de ruta para reactivar de forma paulatina la actividad económica.
Los pequeños comercios de menos de 400 metros cuadrados serán los primeros en poder retomar su actividad a partir del 14 de abril, aunque con restricciones en el limite de clientes, medidas adicionales de desinfección y la obligatoriedad de llevar mascarillas en el interior.
El resto de comercios, si todo va bien, se abrirán a partir del 1 de mayo, mientras que restaurantes, hoteles y otros servicios, como salones de belleza o tintorerías, podrán retomar la actividad como pronto a mediados de mayo, aunque esa decisión se supeditará a cómo evolucione la situación.
Los exámenes de final de curso y las pruebas que acreditan la superación del bachillerato se realizarán, pero los centros permanecerán cerrados hasta mediados de mayo, según anunció el canciller austríaco, Sebastian Kurz. El Gobierno, en función de la situación, ofrecerá más datos sobre posibles fechas para retomar las clases presenciales a finales de abril.
Este levantamiento de ciertas restricciones no supone una vuelta a la normalidad, advirtió Kurz, quien subrayó que no se contempla permitir grandes eventos públicos al menos hasta finales de junio.
Tampoco hay una fecha prevista para la reapertura de cines y teatros, cuya situación se evaluará en las próximas semanas.
Otras instalaciones públicas, como piscinas, pistas deportivas y gimnasios, permanecen cerradas y a finales de abril se ofrecerá más información sobre posibles fechas de reapertura.
Austria tiene unos 12,000 casos de coronavirus confirmados y 220 fallecidos, pero con una pronunciada tendencia a la baja en las nuevas infecciones.