Estados Unidos anunció este viernes nuevas sanciones contra Irán como respuesta al ataques en los últimos días a tropas estadounidenses y aliadas en Irak, informaron los secretarios de Estado, Mike Pompeo, y el Tesoro, Steve Mnuchin, en una conferencia de prensa en la Casa Blanca.
Mnuchin dijo que el presidente Donald Trump está firmando una orden ejecutiva que impone sanciones adicionales a “todo individuo que sea propietario, opere, comercie o asista a sectores de la economía de Irán, como construcción, manufacturas, textiles y minería”.
También anunció “17 sanciones específicas contra las principales firmas de hierro y acero de Irán”, y “un barco involucrado en la transferencia de productos como resultados de estas acciones”.
Mnuchin explicó que estas medidas “cortarán miles de millones de dólares de apoyo del régimen iraní”.
También anunció acciones directas contra funcionarios iraníes que promueven las actividades desestabilizadoras del “régimen” y “los involucrados en el ataque con misiles balísticos” el miércoles a dos bases militares en Irán.
“Las sanciones son parte de nuestros esfuerzos para detener las actividades terroristas globales del régimen iraní y, como ha dicho el presidente (Trump), continuaremos aplicando sanciones económicas hasta que Irán ponga fin a sus actividades terroristas y se comprometa a no tener nunca armas nucleares”, dijo Mnuchin.
Pompeo, por su parte, dijo que Trump está cumpliendo la promesa que hizo el día después del ataque a las fuerzas estadounidenses en Irak y señaló que “altos funcionarios iraquíes son responsables de la violencia del régimen dentro y fuera del país”.
“Estamos golpeando el corazón del aparato de seguridad interno de la República Islámica”, afirmó Pompeo. “Estas sanciones incluyen al secretario del Consejo Supremo Nacional y al comandante de la fuerza Basij”.
Basij es una fuerza paramilitar formada por voluntarios subordinada a la Guardia Revolucionaria que actúa como los ojos y los oídos del gobierno islámico.
“Esa es la brutal escuadra del régimen, que en los últimos meses mató aproximadamente a 1.500 iraníes que simplemente demandaban libertad”, dijo Pompeo.
El secretario de Estado se refirió a las protestas en Irán en octubre después de un aumento de los combustibles que desataron una respuesta represiva de las autoridades en varias partes del país.
“Nuestras acciones van dirigidas también a otros altos dirigentes cercanos al ayatolá (Alí Jamenei, el líder supremo de Irán), explicó Pompeo.
Agregó que “ellos han llevado a cabo complots y campañas desestabilizadoras en todo el Oriente Medio y en el mundo, han empleado soldados en los campos de batalla de la región, han entrenado milicias en Irak, Siria y otros lugares.”
Pompeo dijo que la meta de la campaña es impedir el acceso e Irán a recursos para continuar su destructiva política exterior y que el deseo de Estados Unidos es que Teherán se comporte como una nación normal.
“Creemos que las sanciones que las sanciones que imponemos hoy refuerzan ese objetivo estratégico“, sentenció el secretario de Estado.