Israel rechazó por completo el anuncio de la fiscal Fatou Bensouda de la Corte Penal Internacional (CPI) sobre la existencia de criterios suficientes para lanzar una investigación por presuntos crímenes de guerra contra los palestinos.
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, lamentó el anuncio de Bensouda este viernes y calificó a sus intenciones contra Jerusalén, que rechazó totalmente, como “infundadas”, “indignantes”, y una “farsa de justicia”.
Bensouda aseguró que existen bases suficientes para que se inicie una investigación sobre Israel, pero primero, la propia CPI debe de determinar su capacidad jurisdiccional sobre los territorios de Gaza, Cisjordania y Jerusalén oriental.
“Este es un día oscuro para la verdad y la justicia. La fiscal de la CPI aparentemente ha decidido no descartar completamente el reclamo palestino contra el Estado de Israel. Es una decisión infundada e indignante”, manifestó Netanyahu en un comunicado en inglés.
Prime Minister Benjamin Netanyahu:
"This is a dark day for truth and justice.
The ICC prosecutor has decided not to dismiss outright the Palestinian claim against the State of Israel. It is a baseless and outrageous decision. pic.twitter.com/SM1ve1ombw— PM of Israel (@IsraeliPM) December 20, 2019
En seguida, Netanyahu aseguró que la CPI, “no tiene jurisdicción en este caso, la CPI solo tiene jurisdicción sobre peticiones enviadas por Estados soberanos, pero nunca ha habido un Estado palestino”.
Por ello, tachó a la decisión de la fiscal como una que ha convertido a la CPI en “una herramienta política para deslegitimar el Estado de Israel”, y afirmó que la funcionaria ha ignorado todos los argumentos judiciales que Jerusalén ha aportado.
Previo al anuncio de Bensouda este viernes, el fiscal general de Israel, Avijai Mandelblit, publicó una opinión legal de 34 páginas en la que aseguró que la CPI carece de total jurisdicción para abrir una investigación contra Israel, reportó el sitio The Times of Israel.
“La posición legal de principios del Estado de Israel, que no es parte de la CPI, es que la Corte carece de jurisdicción en relación con Israel y que cualquier acción palestina con respecto a la Corte es legalmente inválida”, escribió Mandelblit en la opinión legal.
Mandelblit señaló que solo los Estados soberanos pueden solicitar jurisdicción penal a la CPI, cosa de la que los palestinos carecen; que Israel mantiene reclamos legales válidos sobre los territorios palestinos, y que Jerusalén y los palestinos han acordado resolver sus disputas en un marco de negociaciones.
Netanyahu acusó a la fiscal de la CPI de desconocer el nexo del pueblo judío con Cisjordania, y subrayó que Israel no se quedará con los brazos cruzados.
“Ha ignorado por completo la historia y la verdad cuando ella dice que el solo acto de judíos viviendo en su patria ancestral, la tierra de la Biblia, que esto es un crimen de guerra”, enfatizó el mandatario.
“No nos quedaremos en silencio, no bajaremos nuestras cabezas ante esta atrocidad. Continuaremos ejerciendo una denuncia contra esta farsa de justicia”, concluyó.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores de Israel, Yisrael Katz, calificó como “grave” y contradictoria al derecho internacional a la decisión de la fiscal Bensouda.
Asimismo, calificó a la decisión de Bensouda como una medida que solo “doblega a la CPI para que se adapte a la propaganda palestina”.
“Rechazamos esta decisión por completo y hacemos un llamado a otros países a hacer esto, y a evitar a que la CPI se convierta en una herramienta política en manos de palestinos en su lucha contra la existencia del Estado de Israel y su derecho a la legítima defensa”, remarcó Katz.
Desde la Autoridad Palestina, la decisión fue celebrada.
El ministro de Asuntos Exteriores palestino, Riyad Maliki, respondió en un comunicado a la afirmación de Netanyahu: “Sí, este es un día oscuro en la historia de Israel porque la corte decidió, después de recabar toda prueba y evidencia, de que hay lo suficiente para abrir una investigación criminal contra Israel por cometer crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad”.
Maliki aseguró que Israel, “se ha vuelto parte de las filas de países que cometen crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad, y ha entrado al club de Estados terroristas y parias, y el criminal debe de rendir cuentas por sus delitos”.
El funcionario calificó también a la decisión como “una victoria para la justicia y el derecho palestino, y una victoria por cada palestino perjudicado por la potencia ocupante”.
En comentarios vertidos directamente contra Netanyahu, Maliki lo acusó de “ocultarse, como de costumbre, bajo argumentos opacos, e intenta alegar antisemitismo cuando Israel es responsable, como país ocupante, de sus crímenes”.
Saeb Erekat, jefe del Comité Nacional de la Autoridad Palestina, calificó como un “paso positivo y alentador que nos acerca más a la apertura de una investigación criminal por crímenes de guerra cometidos en Palestina, poniendo fin a la impunidad de los perpetradores y para contribuir a lograr la justicia”.
A la reacción de Israel la consideró “histérica” y lo acusó de ser “un Estado que se ha puesto a sí mismo por encima del derecho internacional, con un sistema de leyes dirigido a normalizar la situación de la perpetua ocupación, asentamientos coloniales y anexión, todos contradictorios del derecho internacional”.
El funcionario dejó en claro que, mientras que Israel continúe “violando sus obligaciones bajo el derecho internacional”, los palestinos proveerán de lo necesario a la CPI para la investigación.