Los líderes del G7 se pusieron de acuerdo para ayudar a los países afectados por los incendios en la Amazonía «lo más rápido posible», en una cumbre en Francia marcada por fracturas internas sobre la crisis nuclear iraní y la llegada sorpresiva del jefe de la diplomacia de Teherán.
«Estamos todos de acuerdo para ayudar lo más rápido posible a los países afectados por estos incendios», dijo el presidente de Francia, Emmanuel Macron, anfitrión de este foro de grandes potencias, que se reúne del 24 al 26 de agosto en la localidad francesa de Biarritz.
Las imágenes del pulmón del planeta en llamas han levantado una ola de indignación mundial y llevaron este asunto al centro de las discusiones del G7, pese a las críticas de Brasil, que no forma parte de este grupo.
«Nuestros equipos están tomando contacto con todos los países de la Amazonía para que podamos concretar nuestros compromisos con medios técnicos y financieros», detalló el mandatario francés.
Macron rechazó además las críticas sobre una eventual intromisión en asuntos soberanos de otros países, y recordó que Francia es «uno de los nueve países amazónicos» a causa de la Guayana, territorio francés localizado en el noreste de Sudamérica.
«La importancia de la Amazonía para estos países como para la comunidad internacional es tal -en términos de biodiversidad, oxígeno y lucha contra el calentamiento climático- que debemos proceder a una reforestación», abogó el francés.
Llegada inesperada de Zarif
Sin embargo, la unidad que exhibieron los líderes del G7 sobre la Amazonía no resistió a la cuestión de la crisis nuclear iraní, un tema espinoso que amenaza con abrasar Oriente Medio, en el que los que los mandatarios exhibieron importantes fracturas.
En un giro inesperado, el ministro iraní de Relaciones Exteriores, Mohamad Javad Zarif, llegó este domingo por la tarde a Biarritz, donde el presidente francés Emmanuel Macron, y sus pares europeos, intentan convencer al presidente estadounidense Donald Trump de que haga un gesto para salvar al moribundo acuerdo nuclear iraní.
Zarif, que se entrevistó el viernes con Macron en París, se reunió en Biarritz con el ministro de Relaciones Exteriores de Francia, Jean-Yves Le Drian, pero no se prevé ningún encuentro con funcionarios estadounidenses, según fuentes francesas.
Zarif «va a seguir las discusiones sobre las recientes medidas (examinadas) entre el presidente de Irán y de Francia», indicó por su parte el portavoz del ministerio iraní de Relaciones Exteriores, Abbas Moussavi.
Las tensiones sobre el dosier iraní han aumentado en los últimos meses después de que Teherán volviese a poner en marcha su actividad nuclear en respuesta a la abrupta retirada de Estados Unidos del pacto nuclear de 2015 e impusiera duras sanciones comerciales a Irán.
Cruces Macron-Trump
Por la mañana, el presidente francés, que intenta convencer a Washington que rebaje las sanciones sobre el petróleo iraní a cambio de que Teherán cumpla con sus compromisos, anunció que convenció a sus socios del G7, incluyendo a Donald Trump, de exhibir un frente unido sobre Irán.
«Nos pusimos de acuerdo sobre lo que vamos a decir sobre Irán. Pactamos una comunicación común y una decisión de acción para reconciliar un poco las posiciones», señaló Macron.
Pero dos horas más tarde, Trump desmintió que los países del G7 hayan acordado un mensaje común sobre Irán. «No hablé sobre eso», dijo sin más el inquilino de la Casa Blanca a los periodistas.
El imprevisible Donald Trump agrandó también la brecha con sus socios sobre comercio al excluir cualquier desescalada en su guerra comercial con China pese a que los otros líderes del G7 le urgieron apaciguar las tensiones.
El presidente estadounidense no se arrepiente por la escalada de la guerra comercial con China, y sólo «lamenta no haber subido aún más los aranceles» a los productos chinos, indicó una portavoz de la Casa Blanca.
¿Regreso de Rusia en 2020?
Los siete miembros del club de democracias industrializadas acordaron también «reforzar el diálogo y la coordinación» sobre las crisis actuales con Rusia, pero estimaron que era «demasiado pronto» para pensar reintegrar a este país al foro, del que fue expulsad por la anexión de Crimea en 2014.
No obstante, Trump, cuyo país albergará en 2020 la próxima cumbre del G7, está a favor de que Rusia reintegre el grupo.
Trump y Macron se reunieron el domingo con los otros líderes del G7, la alemana Angela Merkel, el japonés Shinzo Abe, el italiano Giuseppe Conte, el británico Boris Johnson y el canandiense Justin Trudeau, con quienes hablarán del estado de la economía mundial.
En las últimas semanas, han aparecido señales preocupantes en grandes economías como Alemania, China y Estados Unidos, que hacen temer una desaceleración económica a nivel global.