El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, dijo que son las debilidades del presidente en disputa, Nicolás Maduro, las que «finalmente lo llevarán a su partida» y que, gracias a ello, «se restablecerán la democracia y la prosperidad en Venezuela».
En entrevista con la Voz de América, el secretario enfatizó en que «a veces la gente piensa que Maduro está ganando y, sin embargo, ha entregado todo su poder a los cubanos y los rusos. Esta es la debilidad de Maduro».
También reiteró que continúan todas las opciones sobre la mesa y que aquellos que continúan apoyando su régimen enfrentarán las consecuencias de sus actos.
Desde la autoproclamación del presidente interino, Juan Guaidó, Estados Unidos ha reconocido su mandato, seguido por varios países de la región como Colombia, Paraguay, Brasil y Chile.
Al respecto, el secretario de estado señaló la importancia que tiene el reconocimiento que le dan 54 países al presidente encargado quien, según él, «en última instancia, devolverá a Venezuela la verdadera democracia y la prosperidad».
«Lo que necesitan es un líder que esté preparado para ayudarlos, que no sea corrupto, que no entregue el poder a los cubanos y exigir intervenciones para que los rusos los salven», aseguró Pompeo a la VOA.
Desde Asunción -Paraguay-, aseguró incluso que, aunque el presidente en disputa aún «tiene control de los elementos del poder», no es un líder legítimo,
Estados Unidos, según él, está listo para apoyar no solo al pueblo venezolano sino a todos los países de la región que reconocen el nuevo liderazgo opositor.
Estados Unidos ha hablado con Juan Guaidó sobre «cómo sería el primer día».» Claro, Maduro se irá. Y queremos asegurarnos de que al día siguiente el mundo esté listo para apoyar a Venezuela. Eso implicará tomar decisiones sobre cómo abordar las transgresiones de líderes militares de alto rango, aquellos que infligieron violencia, y aquellos que hicieron daño a los venezolanos», puntualizó Pompeo en entrevista con la Voz de América.
Sobre el poder militar que aún sigue recayendo en los hombros del líder chavista, el funcionario estadounidense enfatizó en que «la estrategia no es solo una estrategia estadounidense; es la estrategia del pueblo venezolano, los grupos de oposición se unieron, dejaron en claro que era inaceptable lo que hizo el régimen de Maduro». Y, por ello, han decidido apoyar a la Asamblea y a su líder opositor.
Rusia y China
Nicolás Maduro ha contado con el apoyo incondicional de Rusia y China, quienes han manifestado que se debe evitar el intervencionismo en Venezuela, una decisión que puede aumentar las tensiones entre Washington en el Kremlin. No obstante, Pompeo asegura enfáticamente en que «los rusos dirán que los estadounidenses no deberían intervenir en Venezuela. Bueno, quiero decir, es casi gracioso decir, claro, han intervenido de la forma más fundamental».
Para él, «los cubanos poseen el aparato de seguridad. Pensaría que si fueras el líder militar de Venezuela, te sentirías avergonzado por eso». Asegura, entonces, que el pueblo venezolano quiere lidera su propio país, lo cual está apoyando no solo Estados Unidos, sino países como Brasil y Colombia, el Grupo de Lima y la OEA.
En la región
Durante la entrevista con la VOA, Mike Pompeo también se refirió a asuntos de la región como las relaciones comerciales con China, la presencia del gobierno iraní en América Latina, la crisis en Nicaragua y el recorte de fondos a países de América Central.
Sobre China, aseguró que perfectamente un país de América Latina puede tener una relación económica y diplomática con China, al mismo tiempo que lo hace con Estados Unidos: «EE.UU. tiene grandes relaciones económicas con China. Queremos que China crezca y prospere (..) Debería competir. Tenemos democracias aquí en Sudamérica ahora, esto es algo glorioso con mercados libres, el capitalismo y oportunidad… Ese conjunto de valores, de transparencia, de estado de derecho es el que exige el pueblo sudamericano, no es lo que China trae», agregó.
Sobre si cree que el gobierno iraní todavía tiene presencia en América Latina, Pompeo afirma que «no hay duda» y que el dinero que permanece en la región «se utiliza con fines malignos, apoya a Hezbollah, apoya a organizaciones criminales transnacionales y apoya los esfuerzos de terrorismo en toda la región».
Por esta razón, Estados Unidos está trabajando con socios de la región para eliminar esas redes y reducir ese riesgo.
Sobre Nicaragua, Estados Unidos cree que este país está sumido en la dictadura como Venezuela; por ello, los esfuerzos para ambos países son similares: «Queremos que el pueblo nicaragüense tenga todas las grandes cosas a las que tienen derecho y que tanto desean -dijo Pompeo-, y el Sr. Ortega y su esposa, ambos necesitan cambiar para darle a Nicaragua esa oportunidad».
Finalmente, el secretario se refirió a las medidas que tomó Estados Unidos al recortar fondos a tres países de América Central, Honduras, Guatemala y El Salvador, una decisión que, aseguró, podría reconsiderarse comienzan a tomar medidas que detengan y eviten el «enorme desafío migratorio».
Pompeo, quien realiza una gira de cinco días por Sudamérica y tras reunirse con los mandatarios de Chile y Paraguay, se dirige a Perú y, posteriormente terminará en Cúcuta, Colombia, en la frontera con Venezuela, para profundizar los lazos en el hemisferio occidental.