Un tribunal estadounidense dictaminó que Irán y Siria deben pagar un total de 178,5 millones de dólares en daños a la familia de una niña con doble ciudadanía estadounidense-israelí que murió en un ataque terrorista de un miembro de Hamas.
Chaya Zissel Braun tenía 3 meses de edad cuando fue expelida de su cochecito y muerta en octubre de 2014 en un atentado de embestida vehicular en Jerusalem.
El Tribunal de Distrito de Washington decidió el martes que Irán y Siria deben indemnizar a la familia porque los dos países respaldan financieramente a la organización terrorista Hamas.
Nitsana Darshan-Leitner, una abogada que dirige el Shurat HaDin Israel Law Center, representó a la familia.
“Los regímenes criminales en Teherán y Damasco son los mayores patrocinadores estatales del terrorismo en el mundo”, dijo Darshan-Leitner en un comunicado. “Este juicio envía un claro mensaje de que hay un precio muy alto a pagar por financiar el terrorismo y derramar sangre inocente en las calles de Jerusalem”.
El caso fue presentado en un tribunal estadounidense porque el bebé, sus padres y abuelos tienen ciudadanía estadounidense.
Abdelrahman al-Shaludi, de Silwan, quien había sido liberado recientemente de una prisión israelí tras cumplir 14 meses, estrelló su coche en la parada del tren ligero cerca de Guiv’at HaTajmoshet, en el norte de Jerusalem, cuando los pasajeros desembarcaron. Ocho personas resultaron heridas.
Keren Yamima Mosquera, de 22 años, de Ecuador, que había venido a Israel a convertirse al judaísmo, murió de sus heridas varios días después del ataque. El conductor recibió disparos de la policía cuando intentó huir de la escena y murió más tarde en un hospital de Jerusalem.
El padre de Chaya, Shmuel, resultó herido en el ataque; su madre, Hanna, resultó ilesa.
El abuelo del niño, Shimshon Halperin de Israel, dijo a periodistas después del ataque que la bebé nació después de que sus padres intentaran durante años concebir sin éxito. La familia regresaba del Muro Occidental cuando ocurrió el ataque, dijo.
La pareja tuvo otro bebé en agosto de 2015, asistido por el mismo médico árabe-israelí que cuidó de su hija después del ataque.
Fuente: JTA