Jibril Rajoub y el encarcelado Marwán Barghouti son los grandes vencedores de las elecciones internas que tuvieron lugar este fin de semana en Al Fatah, durante el séptimo congreso del movimiento nacionalista palestino.
Los resultados de fuentes en el partido indican que Barghouti, encarcelado en Israel desde 2002 tras ser declarado culpable de cinco asesinatos durante la Segunda Intifada, obtuvo 930 de los alrededor de 1.300 votos emitidos para elegir a los miembros del Consejo Central.
En segunda posición, con 878 apoyos, quedó el actual presidente de la Federación Palestina de Fútbol y ex jefe de la Seguridad Preventiva en Cisjordania, Rajoub.
La victoria de ambos políticos supone un espaldarazo para sus aspiraciones políticas futuras, dada la avanzada edad del actual presidente palestino, Mahmud Abbás, de 81 años, y el debate en la sociedad sobre la necesidad de ir buscando a un sucesor y regenerar las filas del histórico partido.
El Consejo Central es el órgano ejecutivo de Al Fatah y como tal su principal órgano decisorio, aunque en las votaciones también se eligió a los miembros del Consejo Revolucionario.
Según los resultados, en la cabeza de la lista para el Consejo también aparecen, por este orden, el negociador Mohamed Shteye (798 votos), Husein Al Sheij (791), Mahmud Al-Alul (745), el ex jefe de Inteligencia Taufik Tirawi (745) y el actual secretario general de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Saeb Erekat, con 672.
Otro candidato cuyo nombre es barajado como posible sucesor de Abbás es el sobrino del extinto dirigente Yasser Arafat, Naser Al Qidwa, ex representante palestino en la ONU y que quedó en décima posición, con 647 votos.
Durante el congreso, el primero desde 2009 y que se celebra desde el martes en Ramallah, Abbás fue reelegido como presidente del partido, en una votación que muchos vieron con recelo porque se celebró sin aviso previo y a mano alzada, lo que no dejó margen a una posible disidencia.
Además, y a diferencia del de 2009, al que fueron invitados 2.600 miembros, a este congreso sólo fueron convocados unos 1.400, lo que para algunos muestra cómo Abbás se ha quitado rivales del medio y perdido apoyos.
Más aún cuando desde fuera de Cisjordania parece cobrar fuerza el disidente Mohamed Dahlán, ex jefe de la Seguridad Preventiva en Gaza y que, desde su exilio en el golfo Pérsico, parece contar con el apoyo del llamado “Cuarteto Árabe” (Egipto, Jordania, Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos), que ve en él a un posible sucesor.
En los últimos meses, se ha informado de una iniciativa del Cuarteto para reconciliar a Abbás con Dahlán, que mientras tanto ha quedado, junto con sus posibles seguidores, fuera de los foros de control del movimiento Al Fatah.
Tras votar en Ramallah, Abbás dijo sobre el proceso electoral interno que el pueblo palestino daba ejemplo de democracia.
“Este es un festival democrático por parte de todos, el mundo ha sido testigo de unas reuniones celebradas en plena democracia, de forma correcta y transparente”, afirmó. EFE y aurora