Es el primer acuerdo mundial para evitar la agravación del cambio climático. De momento 92 de los 192 países que firmaron el acuerdo ya lo ratificaron, aunque quedan pendientes varios desafíos.
Menos de un año después haber sido adoptado en París, el primer acuerdo mundial para evitar la agravación del cambio climático entra en vigor este viernes, tres días antes de la conferencia de Marrakech, donde se tratará de su aplicación.
“Esta rápida entrada en vigor es un signo político claro sobre el hecho de que todos los países del mundo están comprometidos en una acción global decisiva contra el cambio climático”, declararon en un comunicado Patricia Espinosa, la responsable del clima en la ONU, y Salaheddine Mezouar, el ministro marroquí de Exteriores, que presidirá la nueva conferencia, llamada COP22, que empieza el lunes.
Para entrar en vigor, el acuerdo necesitaba haber sido ratificado por 55 países que representaran al menos el 55% de las emisiones de efecto invernadero. Un objetivo que se logró más rápido de lo previsto, en octubre, permitiendo que el acuerdo entre en vigor ahora.
De momento 92 de los 192 países que firmaron el acuerdo ya lo han ratificado.
Para celebrar su entrada en vigor, París, que el año pasado acogió la COP21, iluminará este viernes de color verde la Torre Eiffel, el Arco de Triunfo y los muelles del Sena. También habrá edificios iluminados en otras ciudades del mundo como Marrakech, Nueva Delhi, Sao Paulo y Adelaida.
A pesar de la rapidez de la adopción del texto, los países tendrán que hacer todavía grandes esfuerzos para lograr el objetivo de limitar por debajo de los 2º centígrados el aumento global de la temperatura.
Los climatólogos recuerdan que la temperatura media del planeta ya ha subido cerca de 1º -mucho más en zonas como el Ártico o el Mediterráneo- por lo que el tiempo apremia.
Para llegar a limitar el cambio climático por debajo de 2°C, las emisiones de gases de efecto invernadero tienen que dejar de aumentar y luego reducirse entre un 40 y 70% entre 2010 y 2050, según los expertos.
“Ahora que el mundo se reunirá en Marrakech, tenemos que recuperar el sentimiento de urgencia que teníamos hace un año” en París, dijo en un comunicado Jim Yong Kim, el presidente del Banco Mundial, que recuerda que el desafío del clima “crece cada día”.
Limitar las emisiones mundiales y luego reducirlas supone un giro radical y a gran escala para abandonar las energías fósiles (petróleo, carbón y gas) y potenciar las energías verdes.
También serán necesarias grandes inversiones para que los sectores de la vivienda, los transportes o la industria consuman menos así como nuevas políticas en agricultura y alimentación.
“A corto plazo, y como mínimo en los próximos 15 años, tenemos que aplicar reducciones sin precedentes de las emisiones y hacer esfuerzos para construir sociedades que puedan resistir al cambio climático”, dijeron el viernes Patricia Espinosa y Salaheddine Mezouar.
Esta cuestión será tratada en la cumbre de Marrakech aunque parece demasiado pronto para que se acuerden nuevos objetivos de reducción.
La COP22 también tratará de la cuestión de la financiación, en particular de las ayudas públicas de 100.000 millones de dólares prometidas a los países en desarrollo.
Fuente:infobae.com