La candidata presidencial demócrata Hillary Clinton dijo al primer ministro Benjamín Netanyahu este domingo que si es electa presidenta de EE.UU. se opondrá a cualquier intento de imponer una solución externa para el conflicto israelí-palestino y rechazará acciones unilaterales en la ONU.
En una reunión conjunta en Nueva York, Clinton dijo que estaba comprometida a luchar contra el movimiento de Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS), así como contra los esfuerzos de deslegitimar a Israel. Además, hizo hincapié en que “un Israel fuerte y seguro es vital para Estados Unidos” y “reafirmó el compromiso inquebrantable” con el país.
Clinton apoyó el paquete de ayuda militar de 38 mil millones de dólares firmado recientemente entre ambos países. Los líderes discutieron sobre Irán, el conflicto en Siria y otros desafíos regionales, incluyendo su respaldo a una solución de dos Estados para el conflicto israelí-palestino negociada por las partes – no impuesta por un organismo externo como el Consejo de Seguridad de la ONU.
Un importante asesor de campaña dijo a Bloomberg News que Clinton pretende impulsar la cooperación en materia de defensa e inteligencia entre ambos países. También dijo que trabajaría en estrecha colaboración con Israel para asegurar que Irán se adhiera a sus obligaciones en virtud del acuerdo de 2015, y combatirá el apoyo al terrorismo contra el Estado judío patrocinado por Teherán.
Según un comunicado de la Oficina del Primer Ministro, Netanyahu expuso la postura de Israel sobre cuestiones regionales y detalló “sus esfuerzos para lograr la paz y la estabilidad”.
También agradeció a Clinton “por su amistad y apoyo a Israel.”
La reunión se llevó a cabo con la presencia del embajador de Israel en EE.UU., Ron Dermer y Jake Sullivan, asesor de Clinton.
Previamente, Netanyahu se reunió con el candidato republicano, Donald Trump durante 90 minutos. En su encuentro, Trump prometió a Netanyahu reconocer a Jerusalem como la “capital indivisible” de Israel.
Otros temas de discusión incluyeron el acuerdo nuclear con Irán y la agitación regional causada por el ascenso del grupo terrorista Estado Islámico.
Fuentes: The Times of Israel