Cuando se habla de actividad sexual entre jóvenes y adolescentes a menudo se piensa en infecciones sexualmente transmitidas o embarazos no deseados.
Pocas veces se habla de los «asuntos de satisfacción sexual» entre este grupo de edad.
Pero una encuesta llevada a cabo en Reino Unido con adolescentes y jóvenes de entre 16 y 21 años, revela que muchos de ellos sufren o han sufrido «angustiantes problemas sexuales», como disfunción eréctil o dificultad para alcanzar el orgasmo.
La investigación, publicada en Journal of Adolescent Health (Revista de Salud Adolescente), encontró que hasta 33% de jóvenes de entre 16 y 21 años que son sexualmente activos han experimentado al menos un problema sexual «preocupante» en el último año de su vida, como dificultad para alcanzar el clímax o lograr y mantener una erección.
Los investigadores de la Universidad de Glasgow y la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres, analizaron datos de 1.875 jóvenes sexualmente activos.
Encontraron que entre las mujeres el problema más común es la dificultad para alcanzar el clímax.
Entre los hombres, lo más común es llegar al clímax demasiado rápido y dificultad para lograr y mantener una erección.
Problema «universal»
El asunto no se remite únicamente a los jóvenes británicos.
«El estudio refleja lo mismo que está ocurriendo en Argentina», afirma la doctora María Silvina Valente, presidenta de la Sociedad Argentina de Sexualidad Humana.
«Entre los jóvenes -de 14 y 15 años que es el inicio de la actividad sexual en este país- he visto a chicas que después de uno o dos años de actividad sexual no han logrado el orgasmo, o tienen problemas de excitación o dolor en el coito»,explica la experta a BBC Mundo.
«Los chicos eyaculan pronto o tienen problemas de erección o ansiedad por el desempeño».
«Pero no piden ayuda porque a esta edad los adolescentes no saben cuál es una conducta sexual normal», afirma.
La causa, asegura la experta, es la falta de información y de educación sexual.
«Muchos de los jóvenes creen que una relación sexual es sólo coital»
«Desconocen o restan importancia a los juegos eróticos y el contacto manual,con lo cual no pueden tener una satisfacción sexual».
«O las chicas no llegan a tener orgasmos porque sus encuentros sexuales acaban cuando termina el varón», agrega.
Ansiedad
No abordar estos problemas en los primeros años de la edad adulta puede conducir a trastornos de ansiedad o a no poder tener relaciones sexuales satisfactorias en el futuro, afirma la experta.
«Tenemos que dejar de hablar sólo de problemas adolescentes, como embarazos no deseados o enfermedades sexuales, y empezar a hablar a los jóvenes de dinámicas sexuales, de contactos que conduzcan al placer, de formas de satisfacer su sexualidad», dice la médica argentina.
Algunas encuestas muestran que hasta 30% de las jóvenes sexualmente activas no tienen orgasmos
A menudo los programas de educación sexual guardan silencio sobre los temas de satisfacción sexual, pero tal como revela la investigación estos asuntos son claramente importantes para los jóvenes y deben abordarse.
La profesora Kaye Wellings, de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres y una de las autoras de la investigación, afirma que «la educación sexual debe hacer mucho más que derribar los mitos sobre el sexo».
«Hay que discutir el placer y promover la igualdad de género en las relaciones para que ambos puedan satisfacerse».
Y Maria Silvina Valente está de acuerdo: «No sólo debemos hablar a los jóvenes de las cosas que no pueden hacer, también debemos hablarles de lo que sí pueden hacer y del pacer que pueden tener».
fuente:bbcmundo