El Parlamento Europeo (PE) pidió este miércoles al Gobierno de Venezuela “la inmediata liberación de todos los presos políticos” y que respete el mecanismo constitucional que permite el revocatorio del presidente.
El pleno del Parlamento Europeo ha aprobado este miércoles con 501 votos a favor, 94 en contra y 73 abstenciones una resolución por la que se insta de forma urgente al Gobierno de Venezuela a poner en libertad a los presos políticos, a que permita la entrada inmediata de ayuda humanitaria y a “respetar todos los mecanismos y procedimientos legales reconocidos por su Constitución, incluido el revocatorio”, según explica la eurodiputada española Beatriz Becerra, de UPyD, que ha negociado la redacción del texto por parte del grupo liberal de la cámara.
No es la primera vez que el Europarlamento se pronuncia sobre Venezuela. Como recuerda la propia resolución, el 27 de febrero de 2014 ya lo hizo sobre la situación general del país. El 18 d diciembre de ese año sobre la persecución de la oposición democrática. Y en marzo de 2015, de nuevo.
El texto de hoy, que ayer fue negociado y cerrado por los cuatro principales partidos (Populares, Socialistas, Liberales y los Conservadores) muestra una “grave preocupación por el serio deterioro de la situación en lo que respecta a la democracia, los derechos humanos y la economía en Venezuelacon el aumento de la inestabilidad política y social”, por lo que llama al “Gobierno a respetar el imperio de la ley y el principio de separación de poderes”.
El documento consensuado es, de nuevo, muy duro con el Ejecutivo de Nicolás Maduro. Le pide “una actitud constructiva” y le “urge a la liberación inmediata de todos los prisioneros políticos”, una condición previa e indispensable para la asistencia en la negociación con la oposición. Y por eso los diputados piden a la alta representante Mogherini a que inste al presidente a que ponga fin a esas “detenciones arbitrarias”.
Aprovechar el proceso de diálogo
Precisamente hoy, Mogherini ha emitido un comunicado al respecto. “Anoche hablé con el ex primer ministro José Luis Rodríguez Zapatero para discutir los esfuerzos conjuntos que están en marcha, junto a Leonel Fernández y Martín Torrijos, para facilitar el diálogo entre el Gobierno venezolano y la oposición. Estamos de acuerdo en que dada la situación política, social y económica del país, el diálogo que está abierto es una oportunidad preciosa para encontrar soluciones pacíficas, respetando los principios democráticos y constitucionales”. Mogherini, igualmente, explicó que espera reunirse con Zapatero en Bruselas próximamente.
La resolución parlamentaria, con poco valor real visto los antecedentes, prosigue pidiendo a las autoridades que “garanticen el derecho constitucional a las manifestaciones pacíficas” y declara que se “garantice la seguridad y el libre derecho de los ciudadanos, y en especial los defensores de los derechos humanos, periodistas y activistas”, pero también llama a los líderes de la oposición a que “ejerzan responsablemente su poder”.
Los eurodiputados han querido con el texto mostrar también su preocupación por el día a día de un país cuya distancia y eco en los documentos legales no parecen corresponderse. No es sencillo encontrar muchos ejemplos de otros lugares que despierten el mismo interés. La semana pasada, el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, explicó a sus colegas del grupo Alde sus impresiones tras haber visitado el país. Y en los últimos meses varias delegaciones, encabezadas por eurodiputados españoles han viajado a Venezuela.
Suministro de productos de primera necesidad
“El texto acordado pide a Venezuela que permita un plan de cooperación con Europa que facilite el suministro de productos de primera necesidad, como alimentos y medicamentos, para ayudar al pueblo venezolano”, ha explicado el socialista Ramón Jáuregui, presidente de la Asamblea Parlamentaria EuroLatinoamericana.
Según Becerra, “Europa debe ser una parte activa en la solución de la grave crisis de Venezuela. Ni podemos ni queremos ser parte del problema, sino contribuir a la solución de la gravísima crisis económica, humanitaria e institucional que sufre Venezuela”.
No todos están de acuerdo. Javier Couso, de Izquierda Unida, ha sido tajante. “Vamos a votar en contra de esta resolución porque creemos que incurre en muchas falsedades. Es una resolución que toma partido ante un diferendo institucional real pero no ayuda a solucionarlo. Hay una finalidad oculta que es forzar que un Gobierno legítimo esté cercado y tenga dificultades (…) Por desgracia creemos que es una resolución que está dentro de la agenda española, hecha a pocos días de empezar una campaña electoral para distorsionar”, ha señalado explicando su voto. El grupo considera elementos importantes tanto el comunicado de la alta representante como el hecho de que los votos de la oposición vayan a ser tenidos en cuenta para el revocatorio.
A diferencia de los de Izquierda Unida, los eurodiputados de Podemos se han abstenido en la votación este miércoles. Hace poco más de un año, en marzo de 2015, los miembros de la formación morada, con Iglesias y Echenique todavía en Estrasburgo, votaron en contra de la resolución, similar, que pedía la liberación de los presos políticos por entender que entorpecía un diálogo muy necesario.
Fuente:elmundo.es