Debido a las bajas temperaturas registradas en Nueva York, este pequeño conejo nació con una parálisis en su cintura. Sus dueños no dudaron en confeccionarle esta ingeniosa silla de ruedas para que se pudiera mover con facilidad.
Los dueños de este pequeño conejo no dudaron un segundo en brindarle toda la ayuda posible.
A causa de las bajas temperaturas registradas en Nueva York, fue el único sobreviviente entre todos sus hermanos. A causa de esto, se le produjo una parálisis desde la cintura para abajo, lo que no le permitía caminar.
Con unos pocos materiales, le construyeron una especial silla de ruedas para que se pudiera desplazar libremente.