Suele ser un dolor de cabeza. Echarles una mirada a los números de la cuenta bancaria, los ahorros, las deudas… no es algo que la mayoría de la gente disfrute.
Incluso aunque no estés pasando por un mal momento económico, ya solo ordenar las cosas y pensar en la mejor manera de conseguir tus objetivos financieros suele requerir un esfuerzo considerable.
Así que BBC Mundo les preguntó a varios asesores cuál es el mejor camino para mejorar el manejo de tus recursos, y la respuesta parece ser más simple de lo que te podrías imaginar.
Te contamos a qué estrategia se refieren.
1. Automatiza tus finanzas
Los expertos coinciden en que automatizar las finanzas podría ser una buena forma de empezar.
¿Por qué?
Insisten en que tiene un efecto psicológico, ya que cuando los pagos y las transferencias quedan establecidos de manera automática, tu planificación funciona mucho mejor.
De hecho, si te propusiste ahorrar un monto mensual y no lo dejas automatizado en tu cuenta, es muy probable que te olvides o que lo dejes para más adelante, ya que es probable que encuentres necesidades más urgentes.
«Así como todos saben que la clave para tener un buen estado físico es una dieta adecuada y hacer ejercicio, también todos saben que la clave para mejorar las finanzas personales es gastar menos y ahorrar más«, dice David Day, especialista en administración de patrimonio de la empresa de asesorías Gold Metal Waters, con sede en Colorado, Estados Unidos.
Es de sobre conocido, de acuerdo. El tema es cómo ponerlo en práctica.
«La buena noticia es que ahorrar e invertir puede ser más fácil que lograr un buen estado físico porque su implementación se puede automatizar», apunta.
«Debería ser fácil no gastar el monto de tu salario que no está en tu cuenta corriente» si has automatizado su transferencia hacia otro destino.
Al final del día es como decir: no lo ves, no lo gastas.
2. Gasta menos de lo que ganas
«El mejor consejo financiero que puedo dar es que gastes menos de lo que ganas», dice Kevin Hegarty, fundador de la empresa Hegarty Advisors, con sede en Nueva York, quien tiene una larga experiencia asesorando empresas y organismos de gobierno, como el Departamento de Defensa de EE.UU.
Para ello, dice, «es fundamental hacer un seguimiento de los gastos».
Aunque hay muchas aplicaciones para hacer este monitoreo, el experto señala que algunas de ellas pueden tener problemas de seguridad relacionados con otros sitios web.
Por eso recomienda un método al estilo tradicional: escribir diariamente los desembolsos en un cuaderno.
«Algunos estudios han demostrado los beneficios hacer la lista de los gastos», apunta.
A pesar de que actualmente cada vez se usan menos los bolígrafos, «el solo acto de escribirlo te llevará a gastar menos». Así, una vez más estamos frente a un efecto psicológico en el manejo del dinero.
El paso siguiente es categorizar aquellos gastos y entender tus hábitos. «Este simple proceso sentará las bases para el éxito financiero», agrega Hegarty.
3. Usa el «método de la avalancha» o el de la «bola de nieve» para pagar deudas
Entre las estrategias más populares para pagar deudas —especialmente con tarjetas de crédito— están el «método de la avalancha» o el de la «bola de nieve», dice Greg Mahnken, analista de la industria crediticia de la empresa consultora Credit Card Insider, con sede en Nueva York.
El método de la avalancha consiste en pagar primero la deuda con la tasa de interés más alta (siempre que ya hayas hecho los pagos mínimos del resto).
«Después de pagar el total de esa deuda, te mueves a la segunda deuda con el interés más alto», explica Mahnken.
Así, evitas cargos que finalmente se comen tu dinero y no te dejan amortizar la deuda.
El método de la bola de nieve funciona a la inversa.
Luego de haber asegurado el pago mínimo de todas tus deudas (igual que en el caso anterior), dedicas tus esfuerzos financieros a pagar primero la deuda más pequeña.
Tras pagar la totalidad de la deuda más pequeña, luego diriges tus ingresos a pagar la segunda deuda más pequeña.
«Este método no te permite ahorrar dinero en el largo plazo, porque no elimina primero tu deuda más costosa, la que tiene los intereses más altos», apunta.
«Sin embargo, puede ser muy estimulante ver un balance de deuda en cero«.
Por otro lado, te permite reducir el número cuentas o tarjetas de crédito con deuda, lo que facilita su seguimiento en la medida que las vas pagando.
4. Invierte el dinero improductivo
Si no estás en apuros financieros y ya has pagado tus deudas, es recomendable tener un «colchón de ahorro» —que sea equivalente a tus ingresos de tres o seis meses— en una cuenta de ahorros que entregue un retorno de al menos 1,5%-2% de interés.
«Esto es para ayudarte a tener un aterrizaje suave en caso de que se produzca una emergencia financiera«, dice Sarah Behr, planificadora financiera de la firma Simplify Financial, ubicada en California.
Cuando tienes asegurado este fondo para cubrir imprevistos, entonces estás preparado para invertir el «dinero improductivo«, explica.
Ese dinero es aquel que se queda estancado en tu cuenta de ahorro y obtiene un mínimo nivel de interés.
Para invertir en el mercado accionario, Behr propone hacerlo en algún índice bursátil amplio; es decir, que incluya a varias compañías.
Y si la opción es contratar a una empresa que gestiona el patrimonio de las personas, hay que tener cuidado con que el costo de la asesoría no resulte mayor que las potenciales ganancias, advierte.
«Los honorarios de gestión y los gastos ocultos pueden erosionar los rendimientos de tu inversión».
fuente:bbcmundo